El centro de los San Antonio Spurs, Victor Wembanyama (1), aplaude después de un partido de baloncesto de la NBA de los Juegos de París 2025 contra los Indiana Pacers en París, el sábado 25 de enero de 2025. (Foto AP/Thibault Camus)
PARÍS — El recuento final del viaje de Victor Wembanyama en París: dos partidos, 50 puntos, 23 rebotes, ocho asistencias, seis tapones, dos canchas dedicadas, una visita a la Torre Eiffel, una aparición en la Semana de la Moda, un partido de la Liga de Campeones asistido y alrededor de un millón de chocaditos de manos.
Y una victoria. No fueron las dos que quería en esta vuelta a casa. Pero hubo una serie de otros momentos que hicieron que este viaje de regreso a París valiera la pena recordar.
“Esta semana fue increíble”, dijo Wembanyama. “Solo estaba viendo a mi familia. No estoy tratando de emocionarme, pero todos hicieron su trabajo para hacer que esta semana fuera increíble”.
El resultado del sábado no fue el que él quería: Indiana 136, San Antonio 98 fue el marcador final, con Tyrese Haliburton anotando 28 para los Pacers. Pero al menos una cosa fue del agrado de Wembanyama, más o menos. Notó durante los Juegos Olímpicos que los franceses son muy apasionados por su himno nacional, y que cuando se interpreta antes de eventos deportivos, los aficionados tienden a ahogar al intérprete cantándolo ellos mismos.
Eso no fue exactamente lo que sucedió el jueves, cuando comenzó la serie Spurs-Pacers. Aparentemente, el llamado de Wembanyama fue escuchado por los franceses en las siguientes 48 horas; las voces desde las gradas fueron mucho más fuertes el sábado. Aún no fue exactamente lo que él quería, pero fue mejor.
“Aprecio el esfuerzo”, dijo Wembanyama.
Él y los Spurs llegaron el lunes, y rápidamente llevó a su equipo a una cena y una excursión de compras. El martes, regresó a su ciudad natal de Le Chesnay y dedicó un par de canchas al aire libre antes de aparecer en la Semana de la Moda. Estuvo en un partido de fútbol del Paris Saint-Germain contra el Manchester City el miércoles. El Juego 1 fue el jueves, la Torre Eiffel el viernes, el Juego 2 el sábado, y luego volando de regreso a San Antonio.
Y hubo mucho más en esa agenda.
“No puedo imaginar lo que fue para Vic volver a casa y jugar”, dijo el base de los Spurs, Chris Paul. “Sé que estaba muy emocionado. Pero hay mucha responsabilidad que viene con eso. Cada medio de comunicación, cada evento, tratando de ver a tu familia a la que no sueles ver a menudo. Y Vic es uno de esos que intenta firmar cada autógrafo”.
Wembanyama dominó el primer partido el jueves, anotando 30 puntos y capturando 11 rebotes en la victoria de San Antonio por 30 puntos. Los Pacers se propusieron hacer un mejor trabajo contra él el sábado, y el entrenador de Indiana, Rick Carlisle, sintió que su equipo lo logró.
No estaba equivocado. Los Pacers fueron agresivos y no dejaron que Wembanyama entrara en ningún tipo de ritmo prolongado. Pero incluso Carlisle se sorprendió un poco cuando miró la hoja de estadísticas después del partido y vio que Wembanyama terminó con 20 puntos y 12 rebotes.
“No se detiene a ese chico”, dijo Carlisle. “Todavía tuvo 20 y 12”.
Wembanyama y los Spurs remontaron un déficit de 15 puntos al medio tiempo, tomaron brevemente la delantera en el tercer cuarto, y luego se desmoronaron mientras los Pacers se alejaban.
“En algún momento él mirará hacia atrás y se dará cuenta de lo especial que fue esto”, dijo Paul. “Desearíamos haber ganado ambos partidos por él”.
Se desconoce cuándo volverá a jugar Wembanyama en Francia. Le encantaría ser parte de partidos en París cada año, y aunque parecería una apuesta segura que la NBA enviará a los Spurs de regreso algún día, una ocurrencia anual podría ser poco probable.
Él sabe esto, y esa es una de las razones por las que trató de apreciar cada segundo de este viaje.
“Hice todo lo posible para que esta semana fuera especial para mi equipo, para mi familia, mis amigos”, dijo Wembanyama. “Pero la gente aún encontró formas de sorprenderme, de hacer que las cosas parecieran importantes para ellos, y yo importo para ellos. Así que, no tiene precio”.