Las tormentas inusuales a principios de julio obligaron a cuatro vuelos, dos de ellos procedentes del Reino Unido, a ser desviados del Aeropuerto de Valencia el lunes por la mañana.
El mal tiempo obligó a los servicios a aterrizar a 180 km al sur en el aeropuerto de Alicante-Elche.
Los vuelos eran de Birmingham, Londres-Gatwick, Ginebra y Oviedo.
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Otros servicios se retrasaron al aterrizar en Valencia, pero las autoridades del aeropuerto dijeron que las cosas habían vuelto a la normalidad.
La Agencia Estatal de Meteorología había advertido de ‘una situación meteorológica adversa que puede generar chubascos y tormentas de muy fuerte intensidad’.
Las fuertes tormentas golpearon el área de Valencia desde alrededor de las 6.00 a.m. y se esperaba que se disiparan alrededor de las 3.00 p.m.
Se registraron niveles de lluvia promedio de alrededor de 40 litros por m2 hora en la provincia de Valencia.
Los números llegaron hasta 59 litros en Xodos y 56.4 litros en Utiel.
Además de los vuelos desviados a Alicante-Elche, el aeropuerto de la Costa Blanca también tuvo que lidiar con una emergencia que involucraba a un pasajero británico con problemas médicos en un vuelo desde el aeropuerto de Leeds-Bradford.
El capitán solicitó un aterrizaje prioritario, que las autoridades concedieron.