SANTIAGO, Chile (AP) — Los chilenos se están abrigando para su otoño más frío en más de 70 años apenas unos días después de tomar el sol en camisetas — un cambio dramático de vestuario provocado esta semana por un frente frío repentino que afecta a partes de América del Sur no acostumbradas a vientos helados en esta época del año.
Las temperaturas batieron récords a lo largo de la costa de Chile y en Santiago, la capital, descendiendo cerca del punto de congelación y convirtiendo a este mes en el mayo más frío que el país ha visto desde 1950, informó la agencia meteorológica chilena.
Una sucesión inusual de masas de aire polar se ha desplazado sobre vastas áreas del sur del continente, dicen los expertos meteorológicos, empujando el mercurio por debajo de cero grados Celsius (32 Fahrenheit) en algunos lugares. Es el último ejemplo de clima extremo en la región — una ola de calor que ahora está asando a México, por ejemplo — que los científicos relacionan con el cambio climático.
“Los últimos días han sido uno de los frentes fríos más largos jamás registrados y uno de los más tempranos jamás registrados” antes del inicio del invierno en el Hemisferio Sur, dijo Raúl Cordero, un climatólogo de la Universidad de Santiago. “Típicamente las incursiones de aire frío desde la Antártida que llevan las temperaturas por debajo de cero ocurren a partir de junio en adelante, no tanto en mayo.”
El frente frío que avanza desde la Antártida ha chocado con aire cálido que llega desde el noroeste del Amazonas, ayudando a alimentar fuertes tormentas de lluvia que azotan a Brasil, según el sistema meteorológico nacional de ese país.
El gobierno de Chile emitió alertas de clima helado para la mayor parte del país e intensificó la asistencia para las personas sin hogar que luchan por soportar las temperaturas gélidas en las calles. La nieve cubrió las cumbres de los Andes y cayó en partes de Santiago, lo que llevó a cortes de energía en muchas áreas esta semana.
“El invierno llegó temprano”, dijo Mercedes Aguayo, una vendedora ambulante que ofrece guantes y gorros en Santiago.
Dijo que estaba contenta por el aumento en el negocio después de la ola de calor récord en el invierno pasado en Chile, que los expertos atribuyeron al cambio climático y al patrón climático cíclico de El Niño.
“Habíamos guardado estos productos (gorros y guantes) durante cuatro años porque los inviernos siempre eran más esporádicos, un día caliente, un día frío”, dijo Aguayo.
La ola de frío de esta semana también sorprendió a partes de Argentina y Paraguay.
La demanda de energía se disparó en muchas partes de Argentina. Los distribuidores redujeron el suministro a decenas de gasolineras e industrias en varias provincias para evitar cortes en los hogares, dijo el principal empresa de hidrocarburos del país, CECHA, el jueves.