PARÍS (AP) — El ex presidente de Francia, Nicolas Sarkozy, se enfrenta a juicio el lunes por acusaciones de que recibió millones de Libia para su exitosa campaña presidencial de 2007, en el último — y más grande — de una serie de casos legales que lo involucran.
Esto viene después de que su condena en un caso de corrupción se volviera definitiva por la más alta corte de Francia el mes pasado.
Sarkozy, de 69 años, fue presidente de Francia de 2007 a 2012. Se retiró de la política activa en 2017.
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El ex presidente ha negado cualquier mal comportamiento.
Aquí hay una mirada a los procedimientos legales.
Presunto financiamiento de Libia
Sarkozy, junto con otras 11 personas, es acusado de haber recibido millones para su campaña presidencial de 2007 en financiamiento ilegal del gobierno del fallecido líder libio Moammar Gadhafi.
Sarkozy ha estado bajo investigación en el caso desde 2013. Se le acusa de corrupción pasiva, financiamiento ilegal de campañas, desvío de fondos públicos libios y asociación criminal. El juicio está programado para durar hasta el 10 de abril.
Los investigadores examinaron las afirmaciones de que el gobierno de Gadhafi acordó secretamente darle a Sarkozy hasta 50 millones de euros ($51.6 millones) para su campaña de 2007. La suma fue más del doble del límite legal de financiamiento de campañas en ese momento, violando las reglas francesas.
La investigación cobró fuerza cuando el empresario franco-libanés Ziad Takieddine dijo al sitio de noticias Mediapart en 2016 que había entregado maletas de Libia que contenían 5 millones de euros (unos $5.1 millones) en efectivo a Sarkozy y a su ex jefe de gabinete. Takieddine luego retiró la acusación y Sarkozy intentó que se cerrara la investigación.
Después de convertirse en presidente en 2007, Sarkozy recibió a Gadhafi en Francia con grandes honores más tarde ese año. Sarkozy luego puso a Francia a la vanguardia de los ataques aéreos liderados por la OTAN que ayudaron a los rebeldes a derrocar el gobierno de Gadhafi en 2011.
Acusaciones de manipulación de testigos
Los jueces de instrucción franceses presentaron cargos preliminares en 2023 contra Sarkozy por su presunta participación en un intento de engañar a los magistrados para eximirlo en el caso de financiamiento de Libia.
Los fiscales financieros dijeron que se sospecha que Sarkozy se benefició de influir corruptamente en un testigo, en referencia a Takieddine.
La esposa de Sarkozy, la ex supermodelo Carla Bruni-Sarkozy, recibió cargos preliminares en julio del año pasado por presunta participación en esfuerzos para presionar a Takieddine. Bruni-Sarkozy quedó bajo supervisión judicial, que incluye una prohibición de contacto con todos los involucrados en el proceso, excepto su esposo.
Escándalo de escuchas telefónicas
La Corte de Casación de Francia el 18 de diciembre confirmó una decisión de la corte de apelaciones que encontró culpable a Sarkozy de corrupción y tráfico de influencias mientras era jefe de estado del país.
Sarkozy ha sido sentenciado a un año de prisión, pero tiene derecho a estar bajo arresto domiciliario con un brazalete electrónico según lo dispuesto por la ley francesa.
Dijo que llevaría el caso al Tribunal Europeo de Derechos Humanos.
Sarkozy fue declarado culpable por primera vez en 2021 por un tribunal de París, un veredicto confirmado en 2023 por un tribunal de apelaciones, por intentar sobornar a un magistrado a cambio de información sobre un caso legal en el que estaba implicado. El caso fue revelado a través de conversaciones telefónicas interceptadas durante la investigación de financiamiento de Libia.
Condenado por financiamiento ilegal de campañas
En febrero del año pasado, un tribunal de apelaciones en París confirmó un veredicto de culpabilidad contra Sarkozy por financiamiento ilegal de campañas en su fallida campaña de reelección de 2012. Fue condenado a un año de prisión, de los cuales seis meses fueron suspendidos.
El ex presidente está acusado de haber gastado casi el doble del monto legal máximo de 22.5 millones de euros en la campaña de reelección que perdió ante el socialista Francois Hollande.
Sarkozy ha negado todas las acusaciones y apeló al Tribunal de Casación en ese caso.