Las predicciones sobre quién será el próximo papa católico romano a menudo resultan inexactas. Antes de la elección del Papa Francisco en 2013, muchos corredores de apuestas ni siquiera lo tenían entre los favoritos.
Esta vez, las predicciones son más complicadas porque Francisco hizo muchas designaciones en un período relativamente corto durante su mandato, diversificando el Colegio de Cardenales y dificultando la identificación de movimientos y facciones dentro del grupo.
Aún así, la discusión sobre posibles nombres comenzó hace mucho tiempo detrás de las paredes del Vaticano, y los observadores están prediciendo varias posibilidades.
Algunos son vistos como probables para continuar con la agenda progresista de Francisco, mientras que otros representarían un retorno a un estilo más tradicional. Los expertos también sugieren que el Colegio podría favorecer a un prelado con experiencia en las complejidades de las relaciones internacionales.
Aquí algunos de los contendientes:
Pierbattista Pizzaballa, de 60 años, un italiano que es el principal funcionario del Vaticano para asuntos del Medio Oriente, es considerado un posible favorito. Aunque se convirtió en cardenal solo en 2023, su experiencia en una de las zonas de conflicto más calientes del mundo le ayudó a destacarse.
El cardenal Pizzaballa sería el primer papa italiano desde Juan Pablo I en 1978, pero los expertos dicen que también es considerado una figura internacional y alejado de la política del Vaticano, habiendo pasado gran parte de su carrera en Jerusalén.
También se ha mantenido alejado de las polémicas sobre la doctrina, lo que los expertos dicen que podría ayudarlo a obtener la mayoría necesaria de dos tercios en el Colegio de Cardenales, aunque algunos piensan que podría considerarse demasiado joven para el cargo.