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Palma acogerá las primeras protestas masivas del año este sábado 5 de abril, cuando personas en ciudades de todo el país saldrán a las calles exigiendo soluciones a la crisis de vivienda que, en gran parte, ha sido atribuida al turismo masivo o más bien a las malas políticas turísticas y de vivienda.
El lema de las protestas es “Acabemos con el negocio de la vivienda”, pero se teme que las manifestaciones revivan los recuerdos de las protestas contra el turismo masivo del año pasado y envíen el mensaje equivocado a los posibles turistas.
El mes pasado, una carta firmada por siete grupos de protesta instó a los turistas a no venir a Mallorca.
En la carta afirmaron: “La codicia y avaricia de hoteleros, políticos, inversores inmobiliarios y ‘parásitos’ de todo tipo han llevado al deterioro del territorio ecosistémico de la isla, problemas de infraestructura, servicios públicos saturados, gentrificación y la disminución de la calidad de vida. Todo esto es resultado de un turismo descontrolado.
“Mallorca no es el paraíso que te están vendiendo. La población local está enfadada, y ya no somos hospitalarios porque la tierra que amamos está siendo destruida, y muchos residentes se ven obligados a emigrar.”
La carta concluía: “Es hora de dar un paso adelante. Nuestros líderes no nos están escuchando; es hora de pedirte QUE NO VENGAS. No necesitamos más turistas; de hecho, tú eres la fuente de nuestro problema.
“En este momento, no tenemos más opción que pedir tu comprensión y que entiendas que nosotros, la gente de Mallorca, estamos diciendo: ¡BASTA! ¡QUÉDATE EN CASA!” Para el 2025, la vivienda será uno de los tres temas clave de las acciones que se están planeando. Los otros serán la inseguridad laboral y la noción general de ‘límites’ en la agenda política balear, ya sea ambientales o relacionados con el transporte.