Trabajadores en España reciben permiso remunerado de hasta cuatro días si una catástrofe o evento climático extremo les impide trabajar.

Los empleados en España recibirán hasta cuatro días de permiso remunerado si las condiciones climáticas extremas les impiden llegar a su lugar de trabajo o son enviados a casa.

El Consejo de Ministros aprobó la medida el jueves con la esperanza de garantizar la seguridad cuando exista un riesgo grave e inminente para la vida.

El concepto de permiso remunerado en una situación extrema se probó en Valencia y otras áreas afectadas por el evento DANA en octubre.

El ministro de Trabajo, Yolanda Díaz, dijo: “Por primera vez, las leyes laborales españolas se regularán de acuerdo con la emergencia climática y ningún trabajador tendrá que correr ningún riesgo”.

La ley sobre permisos remunerados protege el derecho de las personas a no ir a trabajar en caso de catástrofes o alertas meteorológicas relacionadas con el clima que puedan ponerlos en peligro.

Además, los sindicatos podrán acordar detener el trabajo durante las alertas y los acuerdos estarán obligados a contener medidas preventivas específicas.

Díaz también destacó que la ley protegerá a los trabajadores si las empresas deciden negarles permisos de ausencia.

Si se necesitan más días libres, las empresas también tendrán la opción de integrar a los empleados en los procedimientos laborales existentes o extender el permiso y contribuir a pagarlo ellos mismos.

Los empleadores también deberán contar con medidas de prevención de riesgos específicamente para desastres y condiciones climáticas extremas.

Los trabajadores también tienen derecho a ser informados sobre cuáles serán estas acciones cuando se active una alerta de desastre.

En caso de un riesgo grave e inminente, las empresas deberán informar a los trabajadores sobre estas medidas lo antes posible y ordenarles que dejen de trabajar hasta que desaparezca el peligro.

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Tendrán un año para elaborar planes de acción, que deberán adaptarse a los riesgos específicos de cada empresa.

“Los riesgos climáticos no son los mismos para un trabajador que trabaja en una empresa de construcción o al aire libre que para un trabajador que, por ejemplo, trabaja en una enfermería o una biblioteca”, dijo Díaz en una entrevista con el canal de televisión TVE.

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