Torrevieja no tiene prisa por cumplir con la fecha límite legal para la introducción de una Zona de Bajas Emisiones (ZBE).
Esto a pesar de estar obligada a hacerlo según las regulaciones europeas para ciudades con más de 50,000 habitantes. El objetivo de la ley es reducir la contaminación limitando el tráfico en ciertas áreas, pero Torrevieja ya ha pasado por alto la fecha límite, que era en julio de 2024.
Según Federico Alarcón, el Concejal de Tráfico, el ayuntamiento quiere que la ZBE coincida con otros cambios planificados en la ciudad, como la peatonalización de ciertas calles y la restricción del acceso de vehículos en la zona del puerto. Estos cambios están destinados a reducir el impacto en los conductores y forman parte de trabajos de reurbanización más amplios, que a su vez están retrasados.
Las ZBE tienen como objetivo limitar el acceso a vehículos más contaminantes para mejorar la calidad del aire y reducir las emisiones de gases de efecto invernadero. Por lo general, esto significa que los vehículos más antiguos y contaminantes no pueden ingresar a las partes centrales de una ciudad.
Sin embargo, Alarcón dijo que no cree que sea necesario implementar una ZBE en Torrevieja, ya que considera que la calidad del aire ya es buena. Las mediciones de estaciones de monitoreo nacionales a lo largo de la CV-905 generalmente muestran niveles dentro de los límites normales.
Pero esto no siempre es así. Los niveles de ozono a menudo superan los límites legales, al igual que las partículas finas. La ciudad cuenta con 60,000 vehículos registrados, con alrededor de 40,000 utilizando la circunvalación N-332 y 35,000 viajando diariamente por la CV-905.