Este miércoles en el municipio de Escorca, surgió una vista impresionante en la conocida zona de Sa Calobra. Ya de por sí un lugar espectacular, Sa Calobra se volvió aún más impresionante con la adición de una característica natural temporal traída por la DANA (Depresión Aislada en Niveles Altos): una majestuosa cascada que caía desde las montañas hasta la carretera.
Las tormentas iniciales en las Islas Baleares han creado una llamativa cascada de casi treinta metros de altura. Esta cascada comienza en la cima de la montaña y cae sobre la carretera que conduce al puerto de Sa Calobra, justo al lado de un restaurante que sirve como punto de recogida para muchos autobuses y autocares.
La fuerza del agua revela la acumulación significativa en la zona, con al menos 70 litros por metro cuadrado según datos recientes. Muchos turistas, asombrados por el impacto dramático de la lluvia, han buscado refugio bajo los porches del establecimiento para maravillarse de esta maravilla natural temporal.
Otros, armados con paraguas, han intentado cruzar la carretera, que sigue inundada por el continuo flujo de agua de la montaña, dejando las rutas de acceso y el descenso al puerto sumergidos bajo varios centímetros de agua.