La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) ha informado que ya no hay alertas meteorológicas activas para las Islas Baleares. El paso de la tormenta DANA por la región provocó el desbordamiento del torrente Es Domingos Gran en Porto Cristo (Mallorca), lo que obligó a cortar temporalmente la carretera Ma-4014 de Cala Murada a Porto Cristo, aunque ahora ha sido reabierta.
También se ha tenido que interrumpir el tráfico en la Ma-4100 (antigua carretera de Sant Llorenç) entre el supermercado Eroski y la rotonda de Vipsa.
Los bomberos y servicios de emergencia de Mallorca respondieron a alrededor de veinte incidentes, principalmente en las zonas de Calviá, Manacor y Puigpunyent, aunque ninguno de ellos fue grave. En total, el paso de la DANA por las Islas Baleares ha dejado 47 incidentes, la mayoría causados por inundaciones leves y caída de ramas y rocas.
En Mallorca se reportaron un total de 38 incidentes, la mayoría de ellos en Manacor, donde la fuerte lluvia hoy, miércoles en la zona ha provocado que el torrente Es Domingos Gran se desborde y un tramo de la carretera de Cala Murada a Porto Cristo haya tenido que cerrarse durante media hora debido a una pequeña acumulación de agua. La lluvia también provocó el cierre parcial de otras tres carreteras en la zona: la Ma-4100, la Ma-4020 y la Ma-4015, aunque el tráfico ya ha sido restablecido.
En Ibiza se han registrado un total de 9 incidentes, como pequeñas inundaciones en la zona de Playa d’en Bossa, pero sin complicaciones importantes. El frente de tormenta, que golpeó la región el martes con la activación del IG1 de Meteobal, dejó una máxima acumulación de lluvia de 63 litros por metro cuadrado en la Serra de Tramuntana y 53 en Ibiza. El gobierno regional agradeció al público por su comportamiento responsable frente a la lluvia y el mal tiempo.
En la península, los españoles se prepararon para más lluvias intensas y tormentas el miércoles, apenas dos semanas después de que las lluvias y las inundaciones repentinas provocaran el desbordamiento de ríos en Valencia y otras partes de España, causando la muerte de más de 200 personas y destruyendo hogares y propiedades. La Agencia Estatal de Meteorología emitió alertas rojas el miércoles por la mañana para las provincias de Tarragona y Málaga, diciendo que esperaba que recibieran hasta 180 milímetros (7.1 pulgadas) de lluvia intensa a torrencial por metro cuadrado en 12 horas que podrían provocar el desbordamiento de ríos y generar inundaciones repentinas.
Se emitieron alertas naranjas para el jueves para el sur de Granada y la zona costera de Valencia de Denia a Sagunto, donde se proyectaba que caerían entre 40 y 120mm (1.6 a 4.7 pulgadas) de lluvia.
Se pronosticaron vientos de hasta 119 km/h y fuertes oleajes para Tarragona, Barcelona y Murcia.
Los servicios de emergencia en Málaga han trasladado a 3.000 personas de viviendas en alto riesgo de inundación cerca del río Guadalhorce al oeste de la ciudad, y en otras áreas pidieron a los ciudadanos que busquen terrenos más altos.
Se suspendieron las clases en escuelas de Málaga, Valencia y algunos municipios de Cataluña. Dos líneas de metro han sido cerradas o parcialmente cerradas en Málaga, junto con tres autopistas consideradas en riesgo de inundaciones repentinas.
En Valencia, donde el gobierno regional y la Cruz Roja repartieron chaquetas y mantas, se cerró el puerto de carga y pasajeros de Gandia, y las finales del torneo de tenis Billie Jean King en Málaga se pospusieron al viernes. La ministra de Trabajo de España, Yolanda Díaz, y los sindicatos recordaron a los trabajadores que no estaban legalmente obligados a ir a trabajar si las condiciones climáticas lo hacían inseguro.