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La finca Son Ramonell en Marratxí fue construida en 1891. ‘Castillo Marratxí’ es como la empresa de proyectos arquitectónicos y diseño de interiores con sede en Palma, Private Hideaway Interior, describe la propiedad.
A partir de 2026 adquirirá un “nuevo esplendor”, según el sitio web de la empresa. “Una vez lugar de encuentro para personalidades importantes, esta propiedad histórica se está transformando en un lugar de lujo para seminarios y eventos. Con sus 16 suites diseñadas individualmente, ofrecerá el escenario perfecto para reuniones ejecutivas, eventos de team building, bodas o fiestas de empresa.”
Indicando que el Castillo “brillará” en su nueva función como lugar de eventos, el sitio web añade que habrá un restaurante con servicio de catering, una lujosa zona de spa con sauna, hammam, piscina y servicio de masajes, y una tienda de recuerdos que venderá objetos de diseño.
Son Ramonell tal como está actualmente; el letrero es de los promotores.
Todo suena bastante bien, pero no para un residente local, quien ha registrado documentos en el Ayuntamiento de Marratxí y en el Consejo de Mallorca solicitando una revisión sobre si lo que se está promocionando está cubierto por las licencias necesarias. Aparentemente, las regulaciones urbanísticas locales solo permiten el uso residencial en la zona.
En el registro de propiedades de alquiler vacacional, Son Ramonell obtuvo una licencia ETV60 en 2019 para comercializar 14 habitaciones. Esta licencia permite alquileres turísticos por un máximo de 60 días al año en dos meses no consecutivos, uno de los cuales no puede ser julio o agosto. El permiso debe renovarse cada cinco años. Lo que se está proponiendo es, por lo tanto, diferente.
Se entiende que el ayuntamiento ha otorgado una licencia de obra para una propiedad que no tiene estatus catalogado en el catálogo de patrimonio de Marratxí. Pero el residente está cuestionando una licencia para el propósito que se está anunciando y que será reacondicionado por PHConstruction.
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