A pesar de algunas evidencias de que el cannabis reduce la presión intraocular del glaucoma, la comunidad oftalmológica no ha abrazado su uso. Una razón citada: La corta duración del efecto significa que un paciente debe fumar o ingerir mucha marihuana para mantener su efecto durante todo el día. Las ambiciones de Skye Bioscience de llevar a los pacientes de glaucoma estos beneficios terapéuticos en un colirio dos veces al día han fallado. La compañía en fase clínica ahora está centrando su enfoque en otro medicamento que apunta al mismo receptor de una manera diferente para una indicación diferente – la pérdida de peso. Al hacerlo, Skye tiene como objetivo demostrar que puede competir con un gigante en el espacio de la obesidad.
