La situación de seguridad en la Planta Nuclear de Zaporizhzhia en Ucrania está “deteriorándose” después de un ataque de drone cercano, dijo el organismo internacional de energía de las Naciones Unidas el sábado.
El ejército ruso ha ocupado la planta desde principios de marzo de 2022, semanas después de la invasión inicial de Ucrania por parte de Moscú.
“Una vez más vemos una escalada de los peligros para la seguridad nuclear y la planta nuclear de Zaporizhzhya. Estoy extremadamente preocupado y reitero mi llamado a la máxima contención de todas las partes y a la estricta observancia de los cinco principios concretos establecidos para la protección de la planta”, dijo Rafael Mariano Grossi, director general del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), en un comunicado.
La planta informó al OIEA el sábado que un explosivo transportado por un drone fue detonado justo fuera del área protegida de la planta, cerca de los “estanques de riego de agua esencial” de la planta y a unos 100 metros de la línea eléctrica Dniprovska, la única fuente de suministro de energía restante para la planta, según el OIEA.
No hubo víctimas ni impacto en el equipo de la planta, aunque la carretera entre las dos puertas principales se vio afectada, dijo el OIEA.
El medio estatal ruso TASS informó que el personal de la planta afirmó que Ucrania envió el ataque de drone.
“A las 7:00 a.m. hora de Moscú [4:00 a.m. GMT], el drone ucraniano dejó caer un proyectil en la carretera que corre a lo largo de las unidades de energía fuera del perímetro. El personal usa esta carretera todo el tiempo. Nadie resultó herido, pero una vez más se creó una amenaza directa para la seguridad del personal y la planta”, dice el informe.
Ucrania no ha emitido ninguna declaración pública sobre el ataque de drone.
Desde la toma de posesión de la planta por parte de Rusia hace más de dos años, los líderes ucranianos han advertido repetidamente que Rusia podría obstaculizar el acceso civil a la energía cerrando la planta, o peor aún: provocar un derretimiento nuclear.
El presidente ucraniano Volodymyr Zelensky dijo a principios de este mes que el ejército ruso inició un incendio en el recinto y dijo que la situación en la planta “no es y no puede ser normal” si sigue bajo control ruso.
“Las plantas de energía nuclear están diseñadas para ser resistentes contra fallas técnicas o humanas y eventos externos, incluidos los extremos, pero no están construidas para resistir un ataque militar directo, al igual que cualquier otra instalación energética en el mundo”, dijo Grossi el domingo.
Los combates alrededor de la planta en 2022 provocaron alarma internacional y finalmente llevaron a inspectores del OIEA a estacionarse permanentemente en la planta ese otoño. Los temores se renovaron en junio de 2023 después de que Ucrania dijera que las fuerzas rusas se estaban retirando del sitio y acusaran a Moscú de prepararse para hacer estallar la planta nuclear desde el interior.
Una contraofensiva ucraniana en la región en 2023 no logró avanzar mucho hacia la liberación de la planta, y el movimiento en la línea del frente en la zona se ha detenido en su mayoría desde entonces.
El incidente se produce mientras Ucrania avanza con su incursión militar en la región de Kursk en Rusia. Zelensky dijo el domingo que la incursión busca crear una zona de amortiguamiento para evitar futuros ataques de Moscú a través de la frontera, informó The Associated Press.
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