El presidente electo Donald Trump ha nominado a su aliada de mucho tiempo y veterana fiscal Pam Bondi como su nueva elección para fiscal general, horas después de que Matt Gaetz retirara su nombre de consideración. Bondi tiene un largo historial en la aplicación de la ley y anteriormente se desempeñó como fiscal general de Florida. Un leal aliado de Trump, formó parte del equipo legal de Trump durante su primer juicio de destitución en el Senado y también lo apoyó públicamente al presentarse en la corte durante su juicio por dinero sucio en Nueva York.
““Pam fue fiscal durante casi 20 años, donde fue muy dura con los delincuentes violentos y mantuvo las calles seguras para las familias de Florida”, dijo Trump en una publicación en redes sociales anunciando su elección. Si es confirmada por el Senado, Bondi se convertirá en la máxima autoridad en materia de aplicación de la ley del país, a cargo de los más de 115,000 empleados del departamento de justicia y de un presupuesto de aproximadamente $45,000 millones. “Durante demasiado tiempo, el partidista Departamento de Justicia se ha utilizado en mi contra y contra otros republicanos, ya no más”, escribió Trump el jueves por la noche.
““Pam reenfocará el DOJ [Departamento de Justicia] en su propósito original de luchar contra el crimen y hacer que América sea segura de nuevo.” Los planes de Trump para el departamento incluyen poner fin al “gobierno armado”, proteger las fronteras de Estados Unidos, desmantelar organizaciones criminales y restaurar la “fe y confianza gravemente dañadas” de los estadounidenses en el departamento. El equipo de transición de Trump espera que el camino de nominación de Bondi sea menos tumultuoso que el de Gaetz.
En reacción al anuncio, el senador republicano Lindsey Graham predijo que Bondi “será confirmada rápidamente”, calificando su selección como “un grand slam, touchdown, hoyo en uno, as, hat trick, mate, medalla de oro olímpica”. La noticia de la nominación de Bondi llegó aproximadamente seis horas después de que Gaetz dijo que no buscaría el destacado puesto en el gabinete, tras días de debate sobre si publicar un informe del Congreso sobre acusaciones de conducta sexual en su contra. Al anunciar su retiro, el joven de 41 años dijo que la controversia sobre su potencial nominación “estaba convirtiéndose injustamente en una distracción” para el trabajo de la próxima administración de Trump.
El informe incluía los hallazgos de una investigación desencadenada por acusaciones de conducta sexual y uso ilícito de drogas. Gaetz ha negado vehemente las acusaciones, pero dijo que esperaba evitar una “escaramuza innecesariamente prolongada en Washington” al retirarse. Más tarde, el jueves, Gaetz felicitó a Bondi, calificándola de “una selección estelar del presidente Trump”. “Es una litigante probada, una líder inspiradora y una defensora de todos los estadounidenses. Ella traerá las reformas necesarias al DOJ”, dijo.
No está claro si Gaetz, quien renunció a su escaño en la Cámara poco después de que Trump lo nombrara fiscal general, intentará ahora retener su escaño. Desde su contundente victoria electoral a principios de este mes, Trump ha nombrado a varios aliados cercanos para ocupar altos cargos en su administración.