Meta ha anunciado el nombramiento de tres nuevos miembros de la junta, incluido el director ejecutivo del Ultimate Fighting Championship (UFC) y aliado cercano de Donald Trump, Dana White. Parece que el director ejecutivo de Meta, Mark Zuckerberg, está haciendo esfuerzos para mejorar las relaciones con Trump, antes de la investidura del presidente electo de Estados Unidos este mes. Hace unos días, el ex viceprimer ministro del Reino Unido y líder de los Demócratas Liberales, Sir Nick Clegg, dejó su cargo como presidente de asuntos globales en la red social. Los otros nuevos miembros de la junta de Meta incluyen a John Elkann, quien lidera la firma de inversión europea Exor, y Charlie Songhurst, un ex ejecutivo de Microsoft. “Dana, John y Charlie agregarán una profundidad de experiencia y perspectiva que nos ayudará a abordar las enormes oportunidades que se avecinan con la inteligencia artificial, los dispositivos ponibles y el futuro de la conexión humana”, dijo el Sr. Zuckerberg en un comunicado. La red social también elogió el papel del Sr. White en convertir a UFC en un negocio global. En una publicación en Instagram de Meta, el Sr. White dijo que le encanta las redes sociales y está “emocionado de ser una pequeña parte del futuro de la inteligencia artificial y las tecnologías emergentes”. El Sr. White ha rechazado previamente cualquier sugerencia de que las plataformas de UFC promuevan discursos de odio, insistiendo en que apoya la libertad de expresión. Hace un año, su tensa discusión con un reportero que cuestionó por qué permitía a los luchadores hacer comentarios anti-LGBT se volvió viral. “Las personas pueden decir lo que quieran y pueden creer lo que quieran”, replicó el Sr. White. El jefe de UFC ha tenido una estrecha relación con Trump durante décadas. El nombramiento de White sigue a la noticia de que Sir Nick estaba siendo reemplazado en Meta por su subalterno, el prominente republicano Joel Kaplan, quien ha manejado las relaciones entre la empresa de redes sociales y el Partido Republicano. Ha habido un aparente deshielo entre Meta y Trump en los últimos meses. Las relaciones habían sido tensas al menos desde que Trump fue expulsado de Facebook e Instagram después del asalto al Capitolio de Estados Unidos en enero de 2021. En agosto, Trump escribió en un libro que Zuckerberg “pasaría el resto de su vida en prisión” si intentaba interferir en las elecciones de Estados Unidos de 2024. Pero el presidente electo suavizó su posición más tarde, diciendo en un podcast en octubre que era “agradable” que Zuckerberg se mantuviera al margen de las elecciones y agradeciéndole una llamada telefónica personal después de que enfrentara un intento de asesinato. Zuckerberg visitó Mar-a-Lago y cenó con Trump después de su victoria electoral en noviembre. A principios de este mes, donó $1 millón al fondo de inauguración del presidente electo.
