MIAMI – Shohei Ohtani miró hacia una multitud visitante que acudió a animarlo a él y a los Dodgers de Los Angeles, y terminó presenciando una de las mejores actuaciones individuales, y temporadas, en la historia de las Grandes Ligas.
Los fanáticos levantaron sus teléfonos para capturar el momento y corearon “¡M-V-P!” mientras Ohtani completaba las bases después de despejar la cerca por quincuagésima vez, convirtiéndose en el primer jugador de las Grandes Ligas con al menos 50 jonrones y 50 bases robadas en una temporada de las Grandes Ligas.
Lo más sorprendente de todo esto? El día de Ohtani ni siquiera había terminado.
Ohtani superó rápidamente el hito de 50-50 en el juego más espectacular de su carrera histórica, convirtiéndose en el primer jugador de las Grandes Ligas en batear tres jonrones y robar dos bases en un juego durante una paliza de 20-4 sobre los Miami Marlins el jueves, que también aseguró un lugar en los playoffs para los Dodgers.
“Fue algo que casi me hizo llorar, para ser honesto”, dijo el campocorto de los Dodgers, Miguel Rojas. “Fue muchas emociones por todo lo que sucede detrás de bambalinas que pudimos presenciar todos los días”.
La superestrella japonesa de 700 millones de dólares de Los Angeles terminó con 6 hits en 6 turnos al bate con 10 carreras impulsadas mientras se convertía en el primer jugador de las Grandes Ligas en batear tres jonrones y robar dos bases en un juego.
“Llegar a los 50 jonrones y 50 bases robadas es algo que quería lograr lo más rápido posible. Y, ya sabes, es algo que voy a atesorar por mucho tiempo”, dijo Ohtani a través de un intérprete en una entrevista televisada.
Ohtani alcanzó el segundo nivel en el jardín derecho-central en dos de sus tres jonrones en el LoanDepot Park. En la sexta entrada, lanzó un slider de 1-1 de George Soriano 438 pies para su jonrón número 49.
Ohtani conectó su 50º jonrón en la séptima, un tiro opuesto de dos carreras a la izquierda contra el relevista de los Marlins, Mike Baumann. Luego, en la novena, su 51º viajó 440 pies hacia el centro-derecha, un jonrón de tres carreras contra el segunda base de los Marlins, Vidal Bruján, quien entró a lanzar cuando el juego ya estaba decidido.
“Para ser honesto, creo que soy el que más sorprendido está”, dijo Ohtani. “No tengo ni idea de dónde salió esto, pero estoy contento de que todo haya ido bien hoy”.
Ohtani llegó al juego con 48 jonrones y 49 bases robadas. Se encargó de las bases robadas temprano, robando su 50º en la primera y su 51º en la segunda. Ha tenido éxito en sus últimos 28 intentos de robo de base.
Rompió el récord de jonrones de la franquicia de los Dodgers de 49 establecido por Shawn Green en 2001. Y se convirtió en el tercer jugador en la historia de las Grandes Ligas con al menos seis hits, tres jonrones y 10 carreras impulsadas en un juego, uniéndose a Walker Cooper de Cincinnati en 1949 y a Anthony Rendon de Washington en 2017.
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Ohtani tiene 120 carreras impulsadas, solo por detrás de Aaron Judge de los Yankees de Nueva York (53 jonrones, 136 carreras impulsadas) en ambas categorías.
Ohtani alcanzó el hito de 50-50 en su juego número 150. Ya era el sexto jugador en la historia de las Grandes Ligas y el más rápido en alcanzar 40 jonrones y 40 bases robadas en una temporada, necesitando solo 126 juegos.
Su récord anterior en jonrones fue de 46 para los Angelinos de Los Angeles en 2021, cuando también hizo 23 aperturas en el montículo y ganó su primer MVP de la Liga Americana.
Fue otra noche memorable para Ohtani en el LoanDepot Park, donde ponchó al entonces compañero de equipo de los Angelinos, Mike Trout de Estados Unidos, para el último out del campeonato del Clásico Mundial de Béisbol de 2023 mientras jugaba para Japón.
“He tenido quizás los momentos más memorables aquí en mi carrera”, dijo Ohtani, “y este estadio se ha convertido en uno de mis favoritos”.
Ya considerado el mejor jugador de béisbol cuyos logros como lanzador y bateador superaron incluso a Babe Ruth, Ohtani alcanzó nuevas alturas como jugador ofensivo mientras se tomaba el año libre de lanzar.
Ohtani firmó su contrato de 700 millones de dólares y 10 años con los Dodgers en diciembre pasado. La estrella de doble vía, que anteriormente pasó seis años con los Angelinos de Los Angeles, ha jugado exclusivamente como bateador designado esta temporada mientras se rehabilita después de una cirugía hace un año por un ligamento del codo lesionado.
Estuvo a un triple de completar el ciclo el jueves, sumando un sencillo productor y dos dobles. Fue puesto fuera en tercera base al intentar extender su segundo doble a un triple.
“No hay mucho que se pueda decir porque no hay nada que nadie pueda hacer al respecto”, dijo su compañero y ex MVP Mookie Betts. “Él es simplemente demasiado bueno”.
La primera base estaba libre cuando Ohtani se presentó al bate en la séptima entrada, pero el manager de los Marlins, Skip Schumaker, decidió no darle base intencionalmente con los Marlins perdiendo 11-3.
“Si fuera un juego apretado, con una ventaja de una carrera o perdiendo por una, probablemente lo hubiera puesto en base”, dijo Schumaker. “Perdiendo tantas carreras, sería una mala jugada en el béisbol, en términos de karma, de Dios del béisbol… Creo que por respeto al juego, íbamos a enfrentarlo. Conectó el jonrón. Eso es parte del juego. Él ha conectado (51) de ellos. Es el jugador más talentoso que he visto”.
La preparación fue clave para que Ohtani se convirtiera en el primer miembro del club de los 50-50. Regularmente se reunía con los entrenadores de bateo del equipo y estudiaba videos de lanzadores rivales para entender sus tendencias con los bateadores y corredores en base.
“Veo todo el trabajo que pone”, dijo recientemente el receptor Will Smith. “No es como si saliera y fuera demasiado fácil para él. Trabaja más duro que nadie. Investiga mucho. Está jugando un juego diferente, así que es divertido verlo”.
Ohtani parecía haber convertido el logro de 50-50 en su misión. Aumentó la frecuencia de sus intentos de robo de bases, y a su vez, su tasa de éxito aumentó.
Pero eso puede que no sea el caso el próximo año cuando regrese al montículo.
“No está lanzando este año, así que creo que está vaciando el tanque ofensivamente”, dijo el manager Dave Roberts. “Creo que el poder, el porcentaje de embasado, el promedio, creo que puede hacerlo como lanzador. Ha hecho algo bastante similar con su OPS. Pero en cuanto a las bases robadas, no estoy seguro de eso”.
Los compañeros de equipo de Ohtani han disfrutado viéndolo conectar jonrones y correr por las bases.
“Honestamente, estoy tratando de aprender de él viendo la forma en que lleva a cabo su negocio día a día. Es muy consistente, el mismo comportamiento en todo momento”, dijo recientemente el jardinero Tommy Edman. “Creo que por eso es un jugador tan bueno”.
El tercera base Max Muncy agregó: “Cada noche siento que hace algo que no hemos visto”.
¿Qué sigue para Ohtani?
Los Dodgers se dirigen a los playoffs en octubre, lo cual será otro primer para Ohtani. Nunca llegó allí con los Angelinos, que nunca tuvieron un récord ganador durante su permanencia en Anaheim.
Otro posible primer lugar podría ser ganar el premio al Jugador Más Valioso de la Liga Nacional como bateador designado. Ningún jugador que haya tenido la mayor parte de su tiempo de juego como BD, sin lanzar, ha ganado el premio MVP, aunque Don Baylor, Edgar Martínez y David Ortiz tuvieron altas posiciones en la votación.
Sería el tercer premio MVP en la carrera de Ohtani.