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Los presentadores de programas nocturnos se enfocaron en la relación demasiado cercana entre Donald Trump y Elon Musk y en cómo uno claramente controla al otro.
Seth Meyers
En Late Night, Seth Meyers habló sobre cómo los votantes han estado más preocupados por los precios de los alimentos, pero Trump ha estado “fácilmente distraído por tonterías” y ha centrado su atención en otras cosas.
Esta semana fue elegido presidente del Kennedy Center, lo que llevó a Meyers a bromear diciendo que la próxima ronda de honores incluiría a “Kid Rock, Lee Greenwood y Big Mouth Billy Bass”.
Esto ha significado que tenga menos tiempo para ayudar a Musk en su proyecto de “desmantelar el gobierno”. Meyers bromeó diciendo que “a veces es divertido pretender que las cosas malas podrían ser buenas”.
En audio de una llamada sobre el Kennedy Center, Trump dijo que iba a hacerlo “caliente” de nuevo, al igual que había hecho con la presidencia. “No hiciste que la presidencia fuera caliente a menos que te refieras a caliente como una fiebre leve”, dijo.
Otra “frívola distracción con la que Trump está obsesionado” es el cambio de nombre del Golfo de México al Golfo de América, lo que ha llevado a que los periodistas de Associated Press sean prohibidos en eventos oficiales de prensa al negarse a obedecer. “¡Al menos déjenles una semana para procesarlo!”, dijo Meyers.
También dijo que “debemos dejar de esperar que las empresas tecnológicas sean parte de la resistencia” con Google y Apple siguiendo el cambio en los mapas oficiales.
Meyers reprodujo un clip de Trump tratando de explicar el desmantelamiento de Musk, que fue un discurso sobre imanes, tractores y aviones. “Cada vez que Trump habla, me siento como un tipo que empezó la temporada dos de Severance sin ver la temporada uno”, dijo.
Dijo que quieren evitar hablar sobre lo que realmente está sucediendo porque “la realidad de lo que están haciendo es impopular e ilegal” y que Musk básicamente quiere “control directo del gobierno” al hacerse cargo del grupo regulador que de otra manera podría detener sus prácticas comerciales.
Dijo que “están sucediendo muchas cosas malas en este momento” y “están tratando de estafarte y esperan que te distraigas con todas las tonterías que pasan por la cabeza de Trump”.
Jimmy Kimmel
En Jimmy Kimmel Live!, el presentador habló sobre la escasez de huevos a nivel nacional, con supermercados aumentando los precios y limitando la cantidad de huevos que los clientes pueden comprar.
Dijo que los huevos normales son ahora “más valiosos que los Fabergé”.
Para el Día de San Valentín, bromeó diciendo que Trump “tenía algo para su azúcar Vladdy” después de una llamada con Vladimir Putin en la que el dictador ruso básicamente obtuvo todo lo que quería de la negociación.
Kimmel dijo que es “realmente sorprendente que el tipo solo haya quebrado tres casinos” mientras decía que “si atacas y asesinas a nuestros aliados, no hará ninguna diferencia en absoluto”.
La explicación confusa de Trump llevó a Kimmel a decir que estamos “a una extraña rueda de prensa de que Trump diga que quiere mudar Ucrania a Gaza”.
Luego, “como si no tuviéramos suficientes preocupaciones”, Kimmel dijo que “el sarampión y los pantalones de pierna ancha están de vuelta”, bromeando sobre la elección de vestuario de Kendrick Lamar en el Super Bowl.
Nos aseguró que “Bobby Brainworm está en el trabajo” para solucionar el sarampión, con el ferviente cruzado antivacunas confirmado como el nuevo jefe de salud y servicios humanos.
En una rueda de prensa, Robert F. Kennedy Jr. dijo que Dios le envió a Trump. “Luego Dios nos va a enviar difteria”, bromeó Kimmel.
El clip mostró a Kennedy participando en “lamidas de trasero de triple A”, lo que Kimmel dijo que habría excitado a Trump. “Melania no pudo excitarlo así la primera noche que se conocieron”, bromeó.
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