En un momento histórico para el legado deportivo de Málaga, el Rey Felipe VI recibió al equipo de baloncesto de Unicaja en el Palacio de La Zarzuela en Madrid, celebrando su victoria en la 89ª Copa del Rey.
El equipo de Málaga, recién llegado de una victoria por 93-79 sobre el Real Madrid en la final de febrero en la Gran Canaria Arena, marcó su tercera victoria en la Copa en la historia del club con una audiencia real sin precedentes.
El equipo, acompañado por el personal, representantes de Unicaja Banco y líderes de la Fundación Unicaja, llegó a Madrid en el tren AVE temprano el jueves 13 de marzo. En el edificio Magnolia, el rey saludó a la delegación, compartiendo un momento ligero con el capitán Alberto Díaz, bromeando sobre lo pesado que era el trofeo.
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Unicaja obsequió a Felipe VI una camiseta personalizada del equipo y un balón conmemorativo firmado, símbolos de su gloria en el campeonato. El presidente Antonio Jesús López Nieto dijo que el evento fue “un día histórico para el deporte malagueño y andaluz”, poniendo especial atención en los 48 años de legado del club.
El entrenador Ibon Navarro llamó a la copa “confirmación de nuestro estatus de élite”, mientras que Díaz señaló el cálido interés del rey en su temporada. El rey, conocido entusiasta del baloncesto, elogió el logro de Unicaja, posando para una foto grupal con el trofeo.
Esta primera recepción real de Unicaja demuestra que han alcanzado la gran liga, habiendo conseguido tres títulos en solo un año. Para Málaga, es un hito de orgullo, uniendo el deporte y la tradición bajo el reconocimiento del rey.
King Felipe VI receives jersey from Unicaja.
Credit: Casa de S.M. el Rey