El portavoz de la Cámara de Representantes de Liberia ha negado estar involucrado en un gran incendio en el legislativo de la nación de África occidental.
El portavoz Jonathan Fonati Koffa fue uno de los interrogados por la policía después de que el edificio del Capitolio fuera incendiado.
No había nadie en el edificio en el momento del incendio, pero las autoridades han iniciado una investigación y ofrecieron una recompensa de $5,000 (£3,900) a quien tenga más información.
Koffa le dijo a la BBC que pasó un total de nueve horas en la comisaría, pero insiste en que solo estaba allí para acompañar a un colega, el Representante Frank Saah Foko.
El incendio ocurrió el miércoles por la mañana, un día después de que los planes para destituir a Koffa de su cargo de portavoz provocaran una protesta tensa.
Varios manifestantes, incluido un asistente del ex presidente George Weah, fueron arrestados durante la protesta.
Tras el incendio, que vio una densa columna de humo negro elevándose sobre la capital, Monrovia, la policía dijo que habían llevado a Koffa, Foko y otros dos para ser interrogados.
El jefe de policía Gregory Coleman se refirió a una publicación de Facebook que Koffa hizo durante las protestas, diciendo que el portavoz debe explicarlo.
Koffa dijo que daría una declaración por escrito sobre la publicación pero que en realidad no había sido interrogado.
Le dijo a la BBC que el incendio podría haberse originado por cualquier motivo.
“Si fue intencional, eso habría sido horrible”, dijo, agregando que “nunca había estado, ni nunca estaría, asociado con ese tipo de violencia”.
Dijo que la parte del edificio dañada por el incendio era antigua y que un contratista había advertido previamente a los funcionarios que estaban “sentados sobre una bomba de tiempo”.
Koffa también pidió una investigación “neutral” e internacional sobre el incendio.
La Cámara de Representantes de Liberia ha estado plagada de una lucha de poder, en la que una facción de legisladores afirma haber destituido y reemplazado a Koffa como portavoz.
Otro grupo ha resistido la acción, calificándola de inconstitucional.
Una decisión de la Corte Suprema no ha logrado resolver la disputa interna.