Angelo Que y Daniella Uy—FOTOS CORTESÍA DE PGT
LUBAO, Pampanga—Daniella Uy y Angelo Que sabían que el campo de Pinatubo en Pradera Verde pondría a prueba cada parte de su juego. Y después de la primera ronda del Campeonato ICTSI Pradera Verde del lunes, ambos se encontraron en posiciones similares—con una ventaja de tres golpes pero cautelosos de lo que les esperaba.
“Es todo sobre estrategia”, dijo Que, un campeón del Asian Tour en tres ocasiones que trabajó metódicamente en el campo azotado por el viento para terminar con una tarjeta de 68 golpes, cuatro bajo par. “Cuando jugué el Pro-Am el domingo, me enfoqué en identificar los lugares correctos para errar en los hoyos difíciles. Si erras en el lugar correcto, aún puedes lograr salvar el par”.
Que hizo cinco birdies contra un único bogey, apoyándose en su experiencia para leer los complicados greens y evitar las profundas trampas de arena que ya han cobrado varias víctimas en el torneo masculino.
Uy, jugando en la división femenina, también navegó el impredecible campo de Pinatubo con paciencia y precisión. Hizo un fuerte movimiento con tres birdies consecutivos a partir del hoyo 12 y terminó con un 68, a pesar de un bogey de cierre que evitó que ampliara la brecha.
“Acorté mi swing para una mejor precisión y sincronización”, dijo Uy. “También trabajé mucho en mi putt dentro de los tres pies, que había sido una debilidad en el pasado”.
La estrella en ascenso Tiffany Lee acecha a tres golpes de distancia con 71, mostrando destellos de brillantez al inicio de su ronda con un 34 de tres bajo par en los primeros nueve hoyos. Pero una larga espera en el cambio interrumpió su ritmo, lo que llevó a un costoso doble bogey en el hoyo 10.
Juego agresivo
“Sentí que tenía el campo descifrado, pero la larga espera en el hoyo 10 interrumpió mi ritmo”, dijo. “Mañana, solo necesito ser paciente, mantener mis tiros en juego y aprovechar las oportunidades de puntuación”.
En el torneo masculino, Keanu Jahns, Jung Jae-hyun, Carl Corpus y Christopher Popp terminaron todos con 71 golpes. Jahns, conocido por su juego agresivo, tuvo que adaptarse a las demandas del campo después de un difícil comienzo que lo llevó a hacer bogey en el hoyo 2 y doble bogey en el hoyo 3.
Se recuperó con cuatro birdies, incluidos tres en los par-5.
El campo de Pinatubo, diseñado para desafiar incluso a los mejores jugadores, se ha demostrado como un campo de batalla impredecible.
Uy y Que tienen el control por ahora, pero saben que no deben sentirse cómodos.
“Voy a seguir mi plan de juego—jugar seguro, divertirme y confiar en el proceso”, dijo Uy.
Y para Que, la experiencia le dice una cosa: “El viento va a ser un factor, y este campo te puede sorprender. Está lejos de haber terminado”.