La familia de una expatriada irlandesa que desapareció hace más de 30 años ha lanzado un nuevo llamamiento de información.
El caso de Bernadette Cooper sigue envuelto en misterio, con su sobrino creyendo que ella podría haber tenido vínculos con la delincuencia organizada, después de supuestamente recibir amenazas de muerte por investigar qué le sucedió.
Bernadette (en la foto de arriba) se mudó a la Costa del Sol con su esposo Brian a finales de la década de 1980 y abrieron el bar Molley Malones en Benalmádena Costa.
Pero las cosas se complicaron cuando el negocio tuvo dificultades para llegar a fin de mes y el matrimonio se rompió.
A finales de 1992, Bernadette decidió cerrar temporalmente el negocio y regresar al Reino Unido, donde había vivido, para solicitar un préstamo que mantendría a flote el bar.
Su último contacto conocido con sus amigos o familiares fue en enero de 1993, cuando llamó a un amigo que vivía en la Costa del Sol para decirle que había conseguido los fondos y estaba de camino de regreso. Nunca más se supo de ella.
Hasta el día de hoy, la familia no sabe si alguna vez tomó su vuelo a España.
Pasaron años contactando a personas a lo largo de la costa, pero nadie afirmó saber nada, y el caso se enfrió.
Hubo nuevas esperanzas de una pista en 2020 cuando la Policía de Surrey reabrió el caso tras recibir una pista del sobrino de Bernadette, Leon Moore.
Moore reveló que el verdadero nombre de Bernadette era en realidad Susan, un hecho que los investigadores nunca supieron antes, lo que significa, según él, que la investigación estaba ‘equivocada desde el principio’.
Moore hizo el comentario durante un episodio de su serie de podcasts llamada “The Missing”.
La serie examinará los últimos movimientos conocidos de Bernadette tanto en España como en el Reino Unido.
Moore está convencido de que su tía, que ahora tendría 81 años, tenía vínculos con una banda criminal en la Costa del Sol.
Un portavoz de la familia dijo: “Por favor, alguien debe saber algo. Su sobrino ya ha recibido una amenaza de muerte.
“¿Fue este un crimen perpetrado por una banda organizada o por alguien que sabía que llevaba dinero?
“Nos estamos comunicando con la comunidad de expatriados en la Costa del Sol en busca de cualquier información que pueda ayudarnos a buscar la verdad.”
Hablando con el Olive Press en 2020, Moore dijo que era ‘atípico’ que su tía desapareciera.
Le dijo a este periódico: “Era una mujer muy valiente, decidida y querida. Es inconcebible que decidiera simplemente desaparecer”.
El último contacto conocido con Bernadette fue una llamada telefónica a un amigo en España anunciando que estaba a punto de regresar para reabrir su bar en Benalmádena.
Ella había dirigido el pub Molly Malone’s, sin conexión con el posterior Molly Malones que abrió en 24-Hour Square, sino el local que pasó a llamarse Wheels, Tapas y Punters en la Avenida Antonio Machado.
A medida que su matrimonio se desmoronaba y en medio de la crisis financiera que golpeó a España y al Reino Unido a principios de la década de 1990, se vio obligada a cerrar las puertas de su negocio al tener dificultades para pagar el alquiler.
Regresó a Mitcham (Londres) – donde la mujer nacida en el condado de Monaghan (Irlanda) había pasado muchos años, para finalizar un divorcio de su esposo separado.
Bernadette esperaba recaudar el dinero para volver a abrir, y parece que lo logró.
Según Leon, en enero de 1993 una de sus amigas en España recibió una llamada triunfal.
Ella le dijo: “Hazme un favor, ¿podrías? Dile al abogado que actúa por el bar que tengo los fondos… dile que no entregue el bar, que estoy de camino de vuelta con el dinero”.
El mensaje se transmitió, pero Bernadette nunca llegó.
Esa llamada fue realizada desde el pub The Horse and Groom en Tooting Broadway, y es el último contacto conocido que alguien ha tenido con Bernadette.
A lo largo de los años, su familia nunca la ha olvidado y ha mantenido viva la búsqueda de Bernadette.
Leon dijo en 2020: “La familia irlandesa ha estado en España numerosas veces, casi de forma anual, y siempre pregunta si alguien sabe algo.
“Mi padre Jim, su hermano, nunca la abandonó. Su desaparición realmente pesaba sobre él. Desde entonces ha fallecido sin conocer la respuesta a lo que le sucedió.
“Esta es una de las razones por las que todavía estoy persiguiendo esto, pero toda la familia quiere saber. Es una herida abierta que nunca ha sanado.
“Si decidió alejarse de todos está bien. Pero si le sucedió algo malo, queremos que quien sea responsable sea llevado ante la justicia.”
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