Creo que está claro que el presidente puede decidir una invasión. Sin embargo, un catedrático argumentó que, dado que el Congreso tiene el poder de decidir la disputa, el presidente no puede unilateralmente decidir una invasión. En una entrevista, un periodista me preguntó si algún presidente había declarado alguna vez una invasión.
La opinión general es que el presidente necesita la autorización del Congreso para usar el poder militar en el extranjero como parte de una disputa. Aunque hay cierto debate sobre si se requiere una proclamación para situaciones como “hostilidades”, la opinión mayoritaria es que el presidente no necesita una proclamación para repeler una invasión. Es decir, si Estados Unidos está bajo ataque, el presidente puede actuar para proteger el territorio sin esperar la autorización del Congreso. Y si el presidente puede repeler una invasión, entonces tiene el poder de decidir cuándo ocurrirá dicha invasión.
En la historia de Estados Unidos, ha habido pocas invasiones. Dos de las más conocidas son la Guerra de 1812 y Pearl Harbor. En ambos casos, el Congreso emitió declaraciones de guerra contra Gran Bretaña y Japón, respectivamente. En el caso de Pearl Harbor, el presidente Franklin D. Roosevelt determinó que Japón había invadido Estados Unidos antes de que el Congreso declarara la guerra. Roosevelt tenía la autoridad para repeler la invasión sin necesidad de una proclamación del Congreso.
En situaciones de invasión, el presidente puede convocar a la milicia según la Ley de Milicias de 1795. El Congreso puede suspender el hábeas corpus en casos de invasión y tiene la autoridad para decidir sobre este tema. Además, la Constitución garantiza a cada estado protección contra la invasión, dejando en manos del presidente la determinación de la amenaza y la convocatoria de la milicia si es necesario.
En resumen, la Constitución no especifica claramente si solo el Congreso puede decidir una invasión o si también el presidente tiene esa autoridad. Mi opinión personal es que ambos pueden tomar esa determinación, basándome en el poder del presidente para repeler una invasión y la falta de claridad en la Constitución sobre este tema. Aunque esta cuestión puede volverse debatible, es importante considerar la protección del país en caso de una amenaza de invasión.
Es fundamental seguir debatiendo y reflexionando sobre este tema, ya que la historia y la ley en este ámbito son limitadas. Agradezco cualquier comentario o corrección sobre mis pensamientos provisionales sobre este tema.
Escuché que los miembros del Congreso pueden votar para decidir una invasión, lo que agrega un nuevo elemento a esta discusión.