Después de más de siete años de un servicio de mantenimiento mínimo que dejó muchos de los parques de la costa virtualmente abandonados, los residentes de la costa están ansiosos por la asunción del nuevo servicio por parte de la empresa municipal Ildo.
La empresa pública, que ya gestiona jardines en los distritos, planea comenzar a operar en las próximas semanas, después de que el Pleno diera luz verde el pasado febrero a la municipalización del servicio.
Pero, primero, el equipo de gobierno ha propuesto que se aumente el personal con nuevos trabajadores para lo que será el mayor encargo al que se enfrentará Ildo. Así, el Ayuntamiento ha publicado detalles de puestos para un asistente administrativo y otros dos jardineros adicionales para la zona costera.
La reversión a la gestión pública de este contrato fue la solución alcanzada por el gobierno de coalición PP-Vox a una licitación en curso, valorada en 10 millones, que llevó a un cruce de quejas entre funcionarios y solicitantes locales. De hecho, la empresa que se consideraba que ofrecía la mejor relación calidad-precio, según el único informe técnico emitido, STV-Evocivil, ha apelado ahora contra el cierre de la licitación ante el Tribunal Central Administrativo de Recursos Contractuales. El Ayuntamiento ha dicho que solo compensará a las tres empresas que respondieron a la licitación con 500 euros.
Ildo es una empresa pública que se dedica a la contratación de personas con diversidad funcional. Para ampliar su número de trabajadores, el Ayuntamiento ya ha ampliado esta gama de mano de obra empleable a personas y grupos en situaciones vulnerables.
En la licitación suspendida, se dijo que el contrato anterior apenas cubría el 40% de las áreas verdes en la costa donde se estimaba que había alrededor de 7,000 palmeras y una superficie de 2.5 millones de metros cuadrados en 213 parques y jardines.
Se contemplaba un personal de 30 empleados aunque el objetivo del ejecutivo es llegar a 40, incluidos los más de 10 que se incorporarán del contrato anterior.