Un par de turistas admiran el reluciente Mediterráneo desde su carruaje tirado por caballos en el paseo marítimo de la ciudad sureña de Málaga, una imagen de postal cuyos días están contados. La ciudad quiere prohibir los carruajes tirados por caballos de sus calles este año para proteger a los animales después de años de críticas al comercio. La decisión de seguir los pasos de otros destinos turísticos como Roma y Chicago decepcionó a los visitantes, incluida Anastasia, una chef que había viajado desde Gran Bretaña. “Es realmente agradable, me impresionó – ver Málaga así es completamente diferente”, dijo la mujer de 47 años mientras descendía de un carruaje. Su compañero turista británico, Robert, estuvo de acuerdo, expresando su asombro por su “increíble” viaje con un “hermoso” caballo. “Estoy seguro de que ayuda a la ciudad a atraer más turistas”, agregó el propietario de 46 años. Los activistas por los derechos de los animales critican los carruajes de caballos para turistas debido a la carga que ejercen sobre los animales, especialmente durante el intenso calor del verano. Las temperaturas veraniegas en Málaga pueden alcanzar los 45 grados Celsius, dijo Concordia Márquez, fundadora de un refugio cercano llamado “Todos los Caballos del Mundo”. “Los caballos y los carruajes tienen que recorrer mucha distancia, tanto para llegar al lugar donde pasan la noche, donde duermen, como para volver a su lugar de trabajo”, añadió Márquez. “Es inhumano hacer que un caballo trabaje así”. – Preocupaciones por el bienestar animal – El ayuntamiento de Málaga había anunciado en 2015 que tenía como objetivo prohibir los carruajes de caballos de sus calles para 2035, pero ahora quiere adelantar la prohibición a este año. Los funcionarios están en conversaciones con los titulares de las últimas 25 licencias para llegar a un acuerdo. “Hemos estado negociando durante mucho tiempo, hemos cumplido el 99 por ciento de las demandas de los propietarios de carruajes”, dijo María Trinidad Hernández, concejala de movilidad de Málaga, a AFP. “Lo que buscamos es el bienestar animal, pero también es cierto que solían tener más lugares por donde circular”, añadió. “Con las obras que se han llevado a cabo en los últimos 20 años, casi no queda ninguno. Solo queda el parque y un poco del paseo marítimo”. Los carruajes de caballos no desaparecerán por completo, seguirán permitidos como parte de festivales y tradiciones como la feria anual de Málaga en agosto. “Lo que no habrá son licencias municipales, el carruaje de caballos turístico, el que tomas y pagas como si fuera un taxi callejero”, dijo Hernández.
