El escolta de los Dallas Mavericks, Luka Doncic, sonríe durante una conferencia de prensa después de la victoria del equipo sobre los Minnesota Timberwolves en el Juego 5 de las finales de la Conferencia Oeste de la NBA el jueves 30 de mayo de 2024, en Minneapolis. (AP Photo/Matt Krohn)
BOSTON — Luka Doncic no se quedaba despierto toda la noche para ver los juegos de las Finales de la NBA cuando era niño. Por lo general, comenzaban alrededor de las 3 a.m. en su Eslovenia natal. Tenía que ir a la escuela unas horas más tarde. Se despertaba y averiguaba quién había ganado.
Pero no hay duda: Doncic estaba pendiente.
“Cada niño que juega al baloncesto sueña con esto”, dijo Doncic. “Yo era uno de ellos.”
Los sueños se hacen realidad para Doncic el jueves por la noche, cuando el jugador de 25 años hace su debut en las Finales de la NBA con los Dallas Mavericks enfrentándose a los Boston Celtics en el Juego 1 de la serie por el título de este año. Podría convertirse en el primer jugador en ganar un título de anotación y un campeonato en la misma temporada desde Shaquille O’Neal en 2000, y un título seguramente solo agregaría argumentos a favor de que Doncic — quien lidera a todos los jugadores en esta postemporada en puntos, rebotes y asistencias — pueda ser el mejor jugador en el juego en este momento.
“Estas serán las finales internacionales”, dijo Kyrie Irving, compañero de Doncic en la retaguardia de Dallas. “Todo el mundo estará mirando. Todas las finales son internacionales, pero el mundo está observando.”
No tuvo que aclarar por qué. Sí, las Finales de la NBA han estado disponibles durante mucho tiempo en más de 200 países y territorios, transmitidas en algo así como 50 idiomas y dialectos diferentes. Y no es nada nuevo que jugadores extranjeros brillen en el escenario más grande de la NBA; dos de los últimos tres MVP de las Finales de la NBA fueron el griego Giannis Antetokounmpo para Milwaukee en 2021 y el serbio Nikola Jokic para Denver el año pasado.
“Increíble. Primera vez aquí. Esperemos que no sea la última”, dijo Doncic el miércoles en el día de los medios de las Finales de la NBA en Boston. “Pero nunca darlo por sentado. Nunca sabes si vas a volver, así que simplemente disfruta la experiencia.”
Doncic — quien se convirtió en padre por primera vez esta temporada, calificando ese acontecimiento como “lo mejor del mundo” — es una corporación global por sí solo, un jugador que habla fluidamente cuatro idiomas y tiene un enorme seguimiento en todas partes. Y un campeonato solo añadiría a su leyenda en rápido crecimiento.
“Luka está en un nivel espectacular, estratosférico”, dijo el miembro del Salón de la Fama Pau Gasol en un evento en España esta semana. “Lo que ha hecho… está al alcance de muy pocos en la historia de este deporte.”
Los números respaldan lo que Gasol está diciendo.
Doncic promedia 28.7 puntos por juego en sus seis temporadas regulares; solo Michael Jordan y Wilt Chamberlain — ambos con 30.1 — tienen un promedio de carrera más alto. Es el único jugador en la historia de la NBA en tener promedios de al menos ocho asistencias y ocho rebotes por juego. Es uno de los dos jugadores con al menos 10,000 puntos, 3,000 rebotes y 3,000 asistencias en sus primeros 400 partidos de carrera; el otro es Oscar Robertson.
“El juego es demasiado simple, demasiado fácil”, dijo el entrenador de los Mavericks, Jason Kidd, a fines de la temporada regular, cuando se le preguntó por qué los votantes aún no han recompensado a Doncic con un premio MVP. “Él hace que parezca demasiado fácil. Desafortunadamente, eso es lo que sucede con algunos de los grandes… damos por sentado su talento.”
Doncic no quiere tener nada que ver con la idea de que ganar es fácil. Puede hacer que parezca fácil — tuvo un juego de 73 puntos esta temporada, 13 juegos diferentes en los que anotó al menos 40 puntos en la temporada regular, y ese número podría haber sido aún mayor considerando que anotó exactamente 39 puntos en otras ocho ocasiones.
El escolta de los Dallas Mavericks, Luka Doncic, a la izquierda, y el escolta de los Dallas Mavericks, Kyrie Irving (11), celebran su victoria sobre los Minnesota Timberwolves en el Juego 3 de las finales de la Conferencia Oeste de la NBA, el domingo 26 de mayo de 2024, en Dallas. (AP Photo/Julio Cortez)
Los entrenadores en su Eslovenia natal lo llaman el mejor jugador del mundo, especialmente después de sus hazañas en los Juegos Olímpicos, el campeonato europeo y la Copa del Mundo en los últimos años. Los entrenadores internacionales contrarios han hecho lo mismo.
“Cuando hablas del coeficiente intelectual del baloncesto, todos tienen diferentes niveles”, dijo Kidd el miércoles. “Cuando miras el nivel de comprensión del juego de Luka, el tiempo y el marcador, quién está en la cancha, él está a la cabeza de la clase en ese sentido. Cuando miras el escenario, no le tiene miedo al escenario, al momento. Exitoso o no, le encanta ese momento. … Estamos jugando en las Finales, debido a su coeficiente intelectual y su disposición a dar un paso adelante en ese escenario y no tener miedo de fracasar.”
Detener a Doncic en estas finales no es una opción, dijo el entrenador de los Celtics, Joe Mazzulla. Contenerlo es el objetivo.
“Simplemente tienes que estar muy consciente de lo que estás dispuesto a aceptar y lo que estás dispuesto a quitar y cuándo es el momento de ajustar”, dijo Mazzulla. “No hay una cobertura. No hay un solo jugador. Se necesitarán múltiples coberturas. Se necesitarán múltiples jugadores. Se necesitará un esfuerzo de equipo.”
Los números no suceden por casualidad, insiste Doncic. Tampoco las victorias. Doncic era un profesional probado incluso antes de llegar a la NBA después de destacar como adolescente en el Real Madrid, un club con el que ha mantenido una estrecha relación. Pero su estrella ha seguido brillando más en cada una de sus temporadas en la NBA — y ahora, los niños en Eslovenia se despertarán durante las próximas semanas para ver cómo le fue a su héroe en las finales.
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“Es muy difícil ganar”, dijo Doncic. “Ves mucha película y trabajas. Y es muy difícil. No creo que la gente entienda lo difícil que es ganar juegos en esta liga, especialmente en los playoffs. Así que creo que nos hemos ganado estar aquí. Nos lo merecíamos. Porque cada juego que jugamos en los playoffs, es realmente difícil ganar.”