¿Por qué tarda tanto tiempo en construir nuevas viviendas?

El problema de cuánto tiempo puede llevar comenzar a construir nuevas viviendas asequibles en Mallorca y las Islas Baleares -cualquier vivienda de hecho- fue destacado recientemente por la noticia de que seis ayuntamientos habían acordado ceder terrenos para la construcción de 1.800 viviendas.

Los seis -Andratx, Calvià, Felanitx, Palma, Santanyí, Sóller- se habían inscrito en la iniciativa Build to Rent del Gobierno Balear. Bajo este esquema, los promotores recibirán alquileres a precios asequibles establecidos por el gobierno por un período máximo de 75 años. Un elemento de costo crucial se elimina de la ecuación ya que el terreno se cede de forma gratuita.

Pero cuando se hizo el anuncio, se dijo que el trabajo no comenzaría hasta 2026 como muy pronto. Dada la necesidad urgente, ¿por qué tomará tanto tiempo?

Una ironía es que las mismas instituciones que facilitan la construcción son las mismas que pueden retrasarla: los ayuntamientos. Son ellos quienes otorgan las licencias. Sin embargo, los procedimientos de planificación -y ha sido así durante años- están plagados por la falta de personal técnico de los ayuntamientos y por lo que puede ser la necesidad de obtener aprobaciones de múltiples agencias. Puede depender de la ubicación, pero se debe consultar a organismos gubernamentales como el departamento de recursos hídricos.

El decreto de simplificación administrativa del gobierno está destinado a abordar este procedimiento prolongado, aunque no trata específicamente la escasez de personal técnico.

La burocracia es una de las razones del retraso. Otra también está relacionada con la escasez de personal: los trabajadores de la construcción. Sandra Verger, gerente de la asociación de constructores, dice que el sector necesita más de 5.000 personas cualificadas para poder responder a la demanda. Explica que cuando las empresas asumen contratos, a menudo hay una cláusula de un año de retraso para comenzar el trabajo. Esta es la demanda actual. La asociación estima que se necesitan 35.000 viviendas nuevas en las Islas Baleares.

LEAR  Juan March, a través de Fleming, propuso a Churchill comprar 59 barcos alemanes amarrados en puertos españoles.

La crisis financiera llevó a una reducción a la mitad de la fuerza laboral, de 35.000 a lo que había sido 70.000 en 2008. Ha habido recuperación, pero aún hay un déficit de alrededor de 10.000 en comparación con hace dieciséis años.

Verger señala que la fuerza laboral está envejeciendo: el 20% tiene más de 55 años y solo el 9% tiene menos de 30. Y al igual que en otros sectores, la construcción se encuentra atrapada en el círculo vicioso de la insularidad y la falta de suministro de viviendas asequibles. El alto costo de la vivienda significa que los trabajadores tienen que gastar una gran parte de sus salarios en alquiler. “Las personas de otras regiones u otros países se desaniman de venir a trabajar en las islas.”

Hay un impulso para reclutar a más jóvenes y más mujeres en el sector y promover más formación. Verger dice: “Estamos tratando de transmitir el mensaje de que el sector de la construcción está volviéndose menos duro y más profesional. Ya no requiere tanta fuerza física como antes.” En este sentido, ha habido cierto éxito en los programas de formación profesional para cierto personal técnico -“tenemos más mujeres que hombres”.