La nueva piscina municipal de Jávea, que comenzó su construcción en 2021, ha sufrido un nuevo contratiempo: fugas de agua que suman un total de 500 litros por semana.
Los costos crecientes plagaron y retrasaron el proyecto, con el ayuntamiento teniendo que pagar 922.000€ adicionales a medida que el presupuesto alcanzaba alrededor de 6 millones de euros.
La autoridad recibió la piscina por parte de la empresa contratista Contratas Vilor el 25 de abril y los técnicos municipales no notaron deficiencias significativas.
Cuando llegó el momento de llenarla, el nivel disminuyó drásticamente durante la noche debido a una fuga, mientras que a los residentes se les recuerda constantemente que ahorren agua durante la sequía.
La alcaldesa de Jávea, Rosa Cardona, confirmó que la piscina pierde 500 litros por semana y no se abrirá hasta que se resuelva el problema.
El concejal de urbanismo, Pere Sapena, dijo que el trabajo realizado por Contratas Vilor tiene una garantía de un año y que el ayuntamiento tiene un aval financiero depositado por la empresa.
Los críticos dicen que el ayuntamiento no debería haber aceptado el trabajo en primer lugar y culparon a los técnicos municipales por no revisar lo suficientemente a fondo.
El PSOE José Chulvi afirmó que incluso si la fuga se resolviera ‘mañana’, la piscina no podría abrirse porque los precios y las normativas de funcionamiento no habían sido aprobados y no se había contratado personal de mantenimiento o socorristas.