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Bart de Wever, el nuevo líder de Bélgica. Crédito de la foto: Facebook N-VA
Después de meses de indecisión, Bélgica finalmente tiene un nuevo gobierno y se trata de una coalición liderada por el partido nacionalista flamenco de derecha.
Ha pasado casi ocho meses y el Rey de Bélgica intervino con un ultimátum, pero en la hora decisiva la Coalición ‘Arizona’ de Bélgica ha llegado a un acuerdo.
El líder del partido nacionalista flamenco N-VA, de ideología antiinmigración, Bart De Wever, se convertirá en el jefe del nuevo gobierno. La coalición está formada por cinco partidos: el N-VA, el Movimiento Reformista de centro francófono (MR), Les Engagés, que son centristas francófonos, el Partido Demócrata Cristiano y Flamenco y el partido flamenco Vooruit. La coalición ha sido apodada ‘Arizona’ ya que los colores de los diversos partidos políticos imitan los de la bandera del estado de Arizona.
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En junio de 2024, había esperanzas de que los partidos de múltiples idiomas pudieran formar un gobierno de coalición que pudiera superar las divisiones lingüísticas de Bélgica y forjar una mayoría simple de partidos compatibles. Sin embargo, las disputas presupuestarias han hecho que las negociaciones se derrumbaran de manera consistente en los últimos ocho meses. El Rey ha otorgado múltiples extensiones mientras esperaba que los partidos de la coalición tomaran una decisión final. El Rey Felipe finalmente dio un ultimátum a De Wever: crear un nuevo gobierno para el 31 de enero o esperar unas nuevas elecciones generales. El miércoles 29 de enero, representantes de cada partido finalmente llegaron a la última etapa de las conversaciones para establecer un gobierno de coalición antes del viernes 31 de enero.
El N-VA y De Wever tienen mucho trabajo por delante después de formar la coalición de gobierno Arizona.
El nuevo gobierno belga se enfrentará a muchas tareas urgentes a medida que comience su mandato en el parlamento con muchas tareas sin terminar mientras los procesos de negociación continuaban durante un período prolongado. El país perdió fechas límite clave durante el intervalo político prolongado, con tareas como elegir un candidato a comisario europeo (lo cual ya ha facilitado) y presentar un presupuesto económico a la Comisión Europea para el otoño de 2024 aún pendientes de procesamiento.
El N-VA y De Wever han afirmado que uno de sus principales enfoques es la independencia de Flandes de Bélgica, ahora se han movido hacia el confederalismo como enfoque planificado, lo que significa que el gobierno se convertiría en un estado federal mínimo pero sus provincias retendrían la mayor parte de su poder.
Las conversaciones han durado más tiempo debido a los enfrentamientos sobre la reducción del déficit presupuestario de Bélgica a través de reformas en impuestos y pensiones. La última región que queda sin gobierno es Bruselas, el líder del Partido Socialista Francófono de Bruselas ha descartado una coalición con el N-VA y De Wever.
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