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Dos jugadores profesionales de rugby franceses acusados de violar a una mujer están disponibles para la selección internacional para el Torneo Guinness Seis Naciones de 2025 después de que el caso de presunta violación en su contra en Argentina fuera desestimado el martes.
El juez en Mendoza, a unos 1.000 km al oeste de la capital, Buenos Aires, desestimó el caso contra los atletas de 21 años, Hugo Auradou y Oscar Jegou, citando evidencia insuficiente.
“Los hechos bajo investigación no constituyen un delito”, dijo el tribunal.
El caso comenzó en julio, cuando una mujer argentina de 39 años presentó una denuncia policial alegando que fue golpeada, estrangulada y violada repetidamente por los jugadores de rugby en su habitación de hotel en Mendoza.
Los jugadores de rugby admitieron haber tenido relaciones sexuales con la demandante, a quien conocieron durante una noche de club llena de alcohol después de su victoria el 7 de julio contra los Pumas de Argentina, pero insistieron en que el encuentro fue consensuado. Fueron detenidos preventivamente, luego puestos bajo arresto domiciliario, durante un mes.
La defensa dijo que el sobreseimiento refuerza su fe en el sistema de justicia.
“Creo que será un punto de inflexión”, dijo Germán Hnatow, abogado que representa a uno de los dos jugadores, a Radio Mitre Mendoza, una emisora de radio local. “Hay muchas acusaciones falsas en términos de delitos sexuales, en términos de violencia de género, que causan daño.”
La demandante puede apelar la decisión. No ha dicho si tiene la intención de hacerlo y su abogado no respondió a una solicitud de comentario.
En los últimos meses, el caso se desentrañó lentamente a medida que la defensa encontraba fallos en la descripción de los eventos por parte de la mujer.
Citando evidencia cuestionable presentada ante el tribunal, incluidos mensajes de voz de WhatsApp que la demandante envió a su amiga bromeando y jactándose sobre el sexo áspero que tuvo con ellos, la fiscalía en septiembre aprobó el regreso de los atletas a Francia bajo ciertas condiciones.
El abogado de la demandante ha explicado cualquier inconsistencia en su relato como resultado de su “shock y estrés extremo”.
Se sometió a exámenes físicos como parte de la investigación y se encontró que tenía una úlcera sangrante aguda y otras lesiones que afirmó estaban relacionadas con su agresión.
La Federación Francesa de Rugby expresó su “alivio y satisfacción” con la decisión del juez. Dijo que los atletas, que habían sido suspendidos debido a la gravedad de las acusaciones, serían elegibles para regresar al equipo nacional “si sus actuaciones deportivas lo permiten”.