El tema de un segundo centro de salud para los residentes de Orihuela Costa fue planteado en la reunión plenaria del pasado jueves por el PSOE, que solicitó una explicación de la situación actual por parte de la coalición gobernante PP/Vox.
Lo que vimos es que el Ayuntamiento y la Consejería Regional aún no tienen del todo claro, un año después, cómo resolverán el problema de la saturación en el centro de salud de Aguamarina, la única instalación médica que actualmente atiende a Orihuela Costa.
Cuando el nuevo equipo de gobierno asumió el poder, el proyecto de ampliación del centro de salud promovido por sus predecesores fue puesto en espera, a pesar de que ya estaba incluido en el presupuesto de la Generalitat y solo faltaba la formalización por parte del ayuntamiento con la transferencia de la parcela adyacente al centro actual, generalmente utilizada como estacionamiento, aunque actualmente, para una feria de verano.
El jueves, sin embargo, el ejecutivo local dio algunas pistas más sobre lo que está sobre la mesa de negociación que mantienen abierta con la administración regional, la autoridad que realmente debería llevar a cabo la obra. Y en este momento, si Valencia no lleva adelante el proyecto, hay dos opciones, según el Concejal de Urbanismo, Matías Ruiz.
La primera es que el Ayuntamiento lleve a cabo la construcción de un segundo centro al norte de la costa de Orihuela con su propio presupuesto y la segunda es que una empresa privada o un promotor realice la obra a cambio de un beneficio de desarrollo urbano, sin duda una parcela costera, que les compense por el esfuerzo financiero.
Matías Ruiz dijo que están a favor de “un segundo centro de salud sin renunciar a la ampliación del centro actual”.
En respuesta a las preguntas de los socialistas, reconoció que no hay un documento renunciando al Ministerio o a su inversión – la ampliación del centro de salud de Aguamarina – que heredaron del gobierno anterior. Lo que el concejal sí dijo es que no van a esperar al Ministerio y que construirán un segundo centro lo antes posible.
Lo que señaló el Concejal de Urbanismo es que, en términos de consumo de agua, 150,000 habitantes viven en la costa de Orihuela en agosto y 50,000 en diciembre, y que, en términos de consumo de electricidad, hay un promedio de 90,000 residentes. Esta cifra, enfatizó Ruiz, contrasta fuertemente con las meras 22,000 tarjetas sanitarias registradas.
Hasta ahora, cabe destacar, la Generalitat se ha negado a construir este segundo centro de salud porque Orihuela Costa no tiene el número mínimo de usuarios registrados, lo cual se debe en gran medida al hecho de que la mayoría de los residentes no están documentados.