El implacable sol del verano ha convertido las calles de la Provincia de Alicante en un horno al aire libre, y quienes más sufren esta situación son las personas sin hogar. Durante una ola de calor que ha batido récords, la Cruz Roja ha intensificado sus esfuerzos para reducir los riesgos asociados con el calor extremo.
El intenso calor de las últimas semanas pone en grave peligro la salud de las personas que viven en la calle y, por lo tanto, es más importante ofrecer servicios y consejos para evitar golpes de calor y, si es necesario, dirigir a estas personas a recursos de salud o cuidado.
Desde la primera semana de julio, la Cruz Roja ha desplegado un equipo de emergencia que ha asistido a 117 personas sin hogar, distribuyendo más de 400 kits para ayudarles a hacer frente a las altas temperaturas. Estos kits incluyen elementos básicos pero vitales: botellas de agua, bebidas isotónicas, termos, cremas solares, sombreros y repelentes de insectos, tanto en spray como pulseras de citronela.
Luisa Martín, trabajadora de la Cruz Roja, explicó la importancia de este servicio para las personas sin hogar. “Durante todo el verano, desde el Centro de Intervención de Baja Demanda (CIBE), hemos estado repartiendo botellas de agua y explicando qué hacer durante la ola de calor a las personas que pasan todo el día en la calle. Ahora salimos todos los días, mañana y noche, para entregar los kits y explicar las acciones que deben tomar para evitar golpes de calor, tanto para ellos como para las mascotas que tienen.”
La Unidad Móvil de Emergencia Social, que patrulla las calles de lunes a sábado, brinda asistencia directa a las personas sin hogar que viven en áreas públicas, tiendas de campaña o chabolas. Tania Sanchís, trabajadora social, explicó que “durante la ola de calor mantenemos toda la ayuda y aumentamos las entregas para prevenir el calor. También entregamos gorras, más agua, bebidas isotónicas y brindamos consejos porque son personas que pasan la mayor parte de su tiempo en la calle. Recomendamos que se queden en áreas centrales a la sombra o reduzcan su tiempo en la calle durante las horas más calurosas.”
Una solicitud en particular ha sido repelente de mosquitos en los kits. “La solicitud vino de los propios usuarios, ya que en verano aumenta el número de picaduras, lo que a menudo causa lesiones. Pensamos que era una solicitud que tenía sentido”, dijo Sanchís.
La falta de áreas con aire acondicionado en la ciudad es una creciente preocupación para los trabajadores de la Cruz Roja. “España es el segundo país donde ha habido más muertes por calor, y eso sucede cuando no tienes lugares con aire acondicionado disponibles”, dijo Martín. “No solo para las personas sin hogar, sino para todos. Necesitamos espacios seguros donde las personas puedan relajarse, con agua fresca o con un botón de emergencia para que puedan ser atendidas si se sienten mal”, dijo la trabajadora social.
Juanjo, una de las personas que ha recibido apoyo de la Cruz Roja, destacó la importancia de tener estos recursos disponibles. “Esto es esencial, porque si no fuera por estas cosas, ¿dónde podríamos conseguir agua fría? El agua fría es absolutamente esencial para mí porque soy diabético, y más aún cuando una persona camina 8 o 9 horas al día, el protector solar también es esencial; todos los días, antes de salir, me lo pongo”, dijo.
El sentimiento de verse abrumado por el calor es intenso entre quienes viven en la calle. “El calor es muy malo, estamos muy abrumados, y desde temprano en la mañana estamos en la calle. A las 10 no sabemos dónde estamos. Gracias a Dios la Cruz Roja está abierta, al menos nos dan algo fresco. De lo contrario, ¿dónde iríamos? No hay ningún lugar en Alicante donde podamos ir, es lo único que está abierto ahora. Nos ayuda y nos permite tener un respiro”, agregó Juanjo.