Ocho turistas británicos están bajo custodia policial después de enfrentarse con la policía en el club de playa Balneario en Illetas. Un camarero y dos agentes de policía resultaron heridos. El grupo estaba en una despedida de soltero. El incidente comenzó cuando un camarero les pidió que no tiraran latas de cerveza y basura al mar.
Según el ayuntamiento de Calviá, su reacción fue “extremadamente violenta”. En un comunicado de prensa, el ayuntamiento dijo: “empezaron a atacar al personal del Beach Club. Dos agentes de la Guardia Civil fuera de servicio y seis agentes de policía intentaron controlar la situación pero fueron recibidos con violencia por parte de los turistas. Finalmente, ocho fueron arrestados y llevados a la comisaría municipal donde pasaron la noche en celdas policiales”.
Hasta ahora, siete personas han denunciado al grupo a la policía por su comportamiento indisciplinado. La policía dijo que el grupo había estado bebiendo de forma excesiva y todos se alojaban en un hotel de Palma.
Esperanza Catalá, concejala de Calviá a cargo de la policía, mantuvo conversaciones esta mañana con el alcalde de Calviá, Juan Antonio Amengual, y dieron todo su apoyo a los propietarios y al personal del Beach Club y a la policía.
Catalá dijo que estarían operando un sistema de tolerancia cero con este tipo de incidentes. “Si no pueden comportarse, deberían ir a otro lugar”, dijo.