La condición física de Naomi Osaka para el Abierto de Australia está en duda después de que la cuatro veces campeona de Grand Slam y ex número uno sufriera una aparente lesión abdominal el domingo mientras jugaba la final de un torneo de la WTA en Auckland.
Osaka había ganado el primer set de la final 6-4 contra Clara Tauson de Dinamarca cuando habló con su entrenador Patrick Mouratoglou, el árbitro de silla y un entrenador del tour antes de decidir retirarse.
La naturaleza de su lesión no estaba clara de inmediato, pero parecía ser abdominal, no la lesión en la espalda que sufrió en el Abierto de China en octubre y que puso fin a su temporada 2024.
Osaka estaba llorando mientras esperaba al entrenador. Luego salió de la pista entre una ovación contenida de los espectadores antes de regresar para la entrega de premios.
“Solo quiero agradecer a todos por recibirme en una ciudad tan hermosa”, dijo Osaka. “Me divertí mucho jugando aquí y realmente lamento cómo terminó, pero espero que hayan disfrutado del tenis que jugamos. Estoy muy agradecida de estar aquí”.
Osaka lideraba 5-1 con dos quiebres de servicio cuando comenzó a verse más tensa, con menos potencia en su saque. Logró llevarse el primer set antes de indicar que no podía continuar.
Osaka regresó al tenis a principios de 2024 después de un largo descanso tras el nacimiento de su hija Shai.
La final de Auckland fue su primera desde su regreso al tenis y si hubiera ganado, habría sido su primer título de cualquier tipo desde el Abierto de Australia de 2021.
La lesión de Osaka llegó después de una buena semana en Auckland. A medida que avanzaba el torneo y ella se hacía más fuerte, la ganadora de cuatro Grand Slam y ex número uno había hablado de cómo el parto y su ausencia en el tour habían cambiado su perspectiva y fortalecido su mentalidad.
“Hay momentos en los que es realmente difícil, donde me desanimo”, dijo Osaka a principios de esta semana. “Pero luego me di cuenta de que estaba embarazada no hace mucho y realmente quería la oportunidad de jugar de nuevo.
Ahora finalmente estoy aquí y estoy luchando muy bien y espero poder seguir así”.
Osaka era la séptima cabeza de serie en Auckland según su ranking de entrada de 57 y se abrió camino hasta la final, derrotando a Lina Glushko de Israel, Julia Grabher de Austria y Hailey Baptiste y Alicia Parks de los Estados Unidos, perdiendo solo un set.
“Quiero tomarme cada partido en serio y si alguien me vence, quiero que sea la pelea de su vida”, dijo Osaka. “Quiero construir esa reputación dentro de la comunidad del tenis. Solo espero poder crecer para luchar por todo”.
“El año pasado fue realmente difícil adoptar esa mentalidad y se podía ver en muchos de mis partidos. El tenis estuvo presente durante todo el año, pero fue más una cuestión de mentalidad y ahora aquí creo que estoy lista para las batallas”.
Osaka dijo que su ausencia del tenis después del parto le había dado una nueva perspectiva.
“Me siento como una veterana y también como una novata al mismo tiempo”, dijo. “Siento que he estado fuera del juego periódicamente hasta el punto en que acepto el hecho de que estoy jugando con gente nueva porque hay gente nueva que entra en el juego cada año y obviamente estuve fuera durante un año y algo más”.
“Estoy muy curiosa por conocer el tipo de personas que son estos jóvenes jugadores. Siento mucha responsabilidad y también siento que no he sido el mejor modelo a seguir en ocasiones. Pero también estoy, supongo, aprendiendo y dando lo mejor de mí cada año”.
“Me siento un poco triste de que mi gran modelo a seguir se haya ido, que es Serena y, por supuesto, Venus. Y espero poder jugar tantos años como ellas y construir una base realmente buena para el deporte”.