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Meghan Markle parece tener una forma extraordinaria de meterse en problemas con las islas. Aparte del último incidente sobre el nuevo logo de su empresa, Meghan Markle, quien visitó Ibiza por primera vez en 2016, y el Príncipe Harry aparentemente rechazaron una invitación de la difunta Reina en 2019 para pasar unas vacaciones en familia con Archie y se fueron a Ibiza en su lugar mientras la monarca y el resto de la familia real pasaban las vacaciones de verano en Balmoral.
La pareja aparentemente hizo lo mismo en 2022 – regresando a Ibiza en lugar de ir a Escocia. El autor Tom Bower afirmó que Harry y Meghan sentían que Archie era “demasiado joven a los tres meses para viajar en avión a Escocia”. Así que volaron en jet privado a las Islas Baleares para una estancia que duró cinco días.
No surgieron imágenes de la pareja con Archie, quien se quedó en una villa lejos de las cámaras. Viajaron con personal de seguridad, y se informó en ese momento que no se necesitaban fuerzas de seguridad locales. Meghan había estado previamente en Ibiza en agosto de 2016, cuando estaba de vacaciones con tres amigos, mientras que Harry ha visitado Mallorca en varias ocasiones.
El Príncipe Harry visitó la isla por primera vez con sus padres y su hermano William en la década de 1980, alojándose en el Palacio de Marivent como invitados de la familia real española. Luego, en 2012, él y un grupo de amigos se quedaron en una villa en Puerto Andratx y lo pasaron genial, incluso fueron al espectáculo de Pirates Adventure en Magalluf.
Irónicamente, el Príncipe William y Kate Middleton se hospedaron con el tío de Kate en Ibiza en agosto de 2006. Gary Goldsmith es el hermano menor de la madre de Kate, Carole Middleton, y es un empresario millonario que hizo su fortuna en reclutamiento. Goldsmith ha vivido en Ibiza durante muchos años y ha sido apodado como la “oveja negra” de la familia Middleton.
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