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Decenas de miles de personas han vuelto a salir a las calles en numerosas ciudades de Eslovaquia bajo el lema “¡Eslovaquia es Europa!”
Acusan al primer ministro de izquierda-nacionalista Robert Fico de mantener una postura pro-rusa y de carecer de solidaridad con Ucrania.
Las manifestaciones pacíficas del viernes por la noche fueron convocadas por varios grupos de oposición y la iniciativa ciudadana “Mier Ukrajine” (Paz para Ucrania), que aboga por un mayor apoyo militar para el país vecino.
En sus pancartas y en los cánticos, los manifestantes exigieron la dimisión de Fico e insistieron en que se detenga de inmediato cualquier cooperación con Rusia. Acusaron al primer ministro de colaborar con autócratas e intentar convertir a Eslovaquia en una autocracia.
Fico y otros políticos del gobierno viajaron recientemente a Rusia, Azerbaiyán y Turquía. Una reunión en diciembre entre Fico y el presidente ruso Vladimir Putin en Moscú causó un gran malestar. El gobierno justificó estos viajes afirmando que sus esfuerzos diplomáticos aseguraron el suministro continuo de gas para el país de la UE.
La sociedad eslovaca se está polarizando cada vez más. Los opositores de Fico alegan que tiene planes de retirar al país de la UE y la OTAN.
El gobierno desestima estas afirmaciones como “mentiras” y a su vez acusa al movimiento de protesta de no respetar los resultados democráticos de las elecciones y de albergar planes para un golpe de Estado.
Desde el regreso de Fico al poder en otoño de 2023, Eslovaquia no ha suministrado armas a Ucrania desde sus propios almacenes militares. Sin embargo, a diferencia de Hungría, hasta ahora ha aceptado todas las resoluciones de la UE contra Rusia y en apoyo de Ucrania.
Personas participan en una protesta contra el gobierno del primer ministro eslovaco Robert Fico bajo el lema “¡Eslovaquia es Europa!”. Jaroslav Novák/TASR/dpa