El presidente francés Emmanuel Macron ha dicho que no nombrará un nuevo gobierno hasta después de que terminen los Juegos Olímpicos de París. Viene después de que el Nuevo Frente Popular (NFP), una coalición de izquierda que constituye el grupo más grande en el parlamento de Francia después de las recientes elecciones, propusiera a una funcionaria poco conocida, Lucie Castets, como candidata a primer ministra. Respondiendo a la propuesta, el Sr. Macron dijo que hacer un nuevo nombramiento antes de mediados de agosto “crearía desorden”. Los políticos de izquierda lo han acusado de intentar “cancelar el resultado de las elecciones legislativas”. Los Juegos Olímpicos comienzan con una ceremonia de apertura en el centro de París el viernes y concluirán el 11 de agosto. Macron aceptó la renuncia del primer ministro Gabriel Attal después de las fuertes pérdidas de su partido centrista en las elecciones parlamentarias que concluyeron a principios de este mes. Sin embargo, Attal y sus ministros acordaron quedarse en un gobierno interino hasta que se pudieran nombrar reemplazos. Bajo el sistema francés, el presidente tradicionalmente nombra a un primer ministro capaz de obtener una mayoría en la Asamblea Nacional. Ahora ningún partido tiene mayoría, pero el NFP controla al menos 182 de 577 escaños, lo que lo pone en la mejor posición para proponer un candidato. El martes, después de semanas de negociaciones y justo una hora antes de que Macron debiera dar una entrevista en televisión, el grupo propuso a Castets, citando su historial de trabajo para defender los servicios públicos. Castets es una economista y funcionaria de 37 años que actualmente trabaja como directora de finanzas y compras para la Ciudad de París, pero no tiene experiencia en política partidista. La elección es inusual ya que el primer ministro suele ser un miembro en funciones de la Asamblea Nacional. Escribiendo en X, Castets dijo que era “con gran humildad pero también con gran convicción” que aceptaba la nominación. Pero al ser preguntado sobre la propuesta del NFP durante una entrevista con la emisora pública nacional France 2, Macron dijo: “Ese no es el problema. El nombre no es el problema. El problema es: ¿Qué mayoría puede surgir en la asamblea? Por supuesto, debemos estar concentrados en los Juegos hasta mediados de agosto. Hasta mediados de agosto, no estamos en posición de cambiar las cosas, porque crearía desorden”. También dijo que ningún grupo parlamentario emergió de las elecciones con mayoría y que todavía no estaba claro quién estaría en posición de nombrar un primer ministro. Dijo que buscaría nombrar un primer ministro con el “apoyo más amplio posible”. Los comentarios de Macron provocaron una reacción de enojo de algunos miembros del NFP. Marine Tondelier, secretaria nacional de Los Ecologistas, uno de los partidos constituyentes del grupo, dijo que Macron “debe salir de la negación”. “Ganamos, tenemos un programa, tenemos un primer ministro”, escribió en X. “Nuestros votantes ahora esperan que se pongan en práctica las medidas de justicia social y ambiental que pidieron. El presidente no puede bloquearlas de esta manera”. Manuel Bompard, coordinador nacional de Francia Insumisa, lo acusó de intentar “cancelar el resultado de las elecciones legislativas”. “Esto es una negación insoportable de la democracia”, dijo. “En Francia, no hay veto presidencial cuando el pueblo expresa su voluntad”.
