Al fin llegó el esperado buen tiempo a Mallorca durante el fin de semana. Se registró una temperatura máxima de 20 grados centígrados en algunas partes de la isla, e incluso algunas personas se dirigieron a la playa. Fue un espectáculo bienvenido después de semanas de lluvia que han llevado a los embalses de la isla a alcanzar niveles casi récord.
Se registró una temperatura máxima de 20 grados centígrados en Binissalem, Santa María, Palma y Lluchamajor. Calviá y Pollensa estuvieron ligeramente más frescos con una temperatura máxima de 19 grados.
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Sin embargo, la imagen del tiempo no fue todo sol. Vientos cercanos a fuerza de vendaval golpearon algunas partes de la isla el sábado y domingo. Se registraron velocidades del viento de 89 kilómetros por hora en el faro de Capdepera, (72kmh Son Servera) (60 Serra d’Alfàbia) (58 Portocolom) (57 Petra) (57 Campos.) Además, las temperaturas nocturnas siguen siendo bajas.
El pronóstico del tiempo a largo plazo para Semana Santa es bastante variado en este momento; habrá sol, pero la Agencia Estatal de Meteorología no descarta la posibilidad de tormentas y lluvias.
La perspectiva para esta semana es que el tiempo inestable continuará, aunque habrá algo de sol y quizás algunas lluvias aisladas.