Si eres un conductor en Orihuela Costa, podrías pensar que los baches se han convertido en una característica de diseño de nuestras carreteras locales.
No solo están empeorando, porque no estamos gastando lo suficiente para mantenerlas, sino que hasta que el ayuntamiento y el contratista resuelvan sus diferencias, a pesar del presupuesto prometido de un millón de euros, es poco probable que mejoren.
Actualmente tenemos la ridícula situación en la que el ayuntamiento está amenazando al contratista, Zaplana Caselles, con una multa de 126,634 euros por incumplimiento de contrato, mientras al mismo tiempo le debe al mismo contratista la suma de 350,000 euros en facturas impagas, por trabajos realizados entre septiembre y mayo.
La razón de la multa propuesta es que el contratista no ha construido el almacén de 1,174 metros cuadrados y área de almacenamiento, área de oficinas, vestuarios para el personal y baños que se incluyeron en las especificaciones de licitación. Aunque esto es un incumplimiento grave, no es suficiente para rescindir el contrato, con el concejal de infraestructuras, Víctor Valverde (PP), proponiendo una multa de 126,634 euros en su lugar.
Así que parece que hasta que se resuelva este impasse, se paguen las facturas y se construya el almacén, no habrá una mejora significativa en las carreteras de Orihuela Costa.
Aunque el equipo de gobierno ya no es el mismo, el problema es, y ha sido desde el inicio del contrato en 2020, la falta de suministro de materiales proporcionados por el ayuntamiento y la inaceptable demora en los pagos.
El estado de las carreteras de Orihuela Costa es uno de los problemas que más quejas atrae de los residentes.
De hecho, AVCRL, la Asociación de vecinos Cabo Roig y Lomas-Orihuela Costa, ha vuelto a escribir al alcalde pidiendo reparaciones urgentes en las calles Carlos Torres, Orihuela y Torrevieja, en la urbanización Torrezenia, con los costos de asfaltado a ser cubiertos por los 60,000 euros asignados en los presupuestos participativos que fueron aprobados en 2019.
Las carreteras están en un estado lamentable, y en las últimas semanas han empeorado aún más, muy en línea con un deterioro similar en la gestión de la zona por parte de este ayuntamiento.
Actualmente nuestros políticos parecen hacer poco más que aplicar parches en el mejor de los casos, ya que posponen sin cesar actuar sobre los muchos problemas que vemos empeorar casi a diario en la costa.