Las ventas de cava espumoso de España cayeron en general un 13% el año pasado, ya que los viñedos en la principal zona productora de Catalunya sufrieron por la sequía en curso.
Las cifras de ventas de exportación disminuyeron aún más un 18%.
Hay temores de que los aranceles propuestos por Trump tengan un impacto importante en el importante mercado estadounidense.
Los precios del cava aumentaron un 11% debido a la inflación y a la reducción de la oferta causada por la sequía.
La Denominación de Origen Cava, que incluye a los principales productores del país como Codorniu y Freixenet, dijo el martes que las ventas nacionales solo disminuyeron un 3,56%.
El grupo representa a 349 bodegas y 38,000 hectáreas de viñedos.
El volumen de negocios cayó en 100 millones de euros, situándose en 2.2 mil millones de euros, una reducción del 4.26% respecto al total de 2023.
España es el principal consumidor de cava, seguido por Bélgica, pero Estados Unidos está en tercer lugar, con alrededor de 17.8 millones de botellas exportadas allí en 2024, lo que representa el 12.7% de las ventas totales en el extranjero.
El presidente de la Denominación de Origen Cava, Javier Pagés, dijo que estaba preocupado por la amenaza de Trump de imponer aranceles del 200% a todas las importaciones de alcohol de la UE, pero añadió que la gente tendría que esperar y ver qué sucede en realidad.
Las ventas totales de DO Cava el año pasado fueron de 218 millones de botellas, con alrededor del 30% vendido en España.
Con la sequía retrocediendo, DO Cava es optimista de que mantendrá los niveles de ventas registrados en 2024 como mínimo.