Las fuerzas rusas se acercaron el martes a la parte central de Vovchansk, una ciudad en el noreste de Ucrania que han estado atacando durante los últimos 10 días como parte de una nueva ofensiva en la región. Roman Semenukha, el subdirector de la administración militar en la región nororiental de Járkov, dijo en televisión el lunes que las fuerzas ucranianas habían perdido alrededor del 40 por ciento de la ciudad, con tropas rusas avanzando desde el norte. Mapas de código abierto del campo de batalla compilados por grupos independientes también muestran que Rusia ahora controla la parte norte de la ciudad, que tenía una población preguerra de 17,000 habitantes. Vovchansk, que se encuentra a solo cinco millas de la frontera rusa, ha sido un objetivo principal de la nueva ofensiva de Moscú. Tanto funcionarios estadounidenses como el presidente Vladimir V. Putin de Rusia han dicho que la ofensiva es parte de un esfuerzo por establecer una zona de amortiguación. La intención, analistas y funcionarios militares dicen, es alejar a las fuerzas ucranianas de la frontera, para evitar que apunten a ciudades y pueblos rusos con artillería. “Las fuerzas del Kremlin intentarán hacer más avances en las próximas semanas y tratarán de crear una zona de amortiguación a lo largo de la frontera ucraniana”, dijo el secretario de Defensa de EE. UU., Lloyd J. Austin III, el lunes durante una reunión con aliados occidentales de Ucrania. Las fuerzas rusas también han avanzado al oeste de Vovchansk, avanzando unas cinco millas en territorio ucraniano justo al norte de Járkov, la segunda ciudad más grande de Ucrania. Ahora controlan más de 70 millas cuadradas de tierra ucraniana en la zona y han logrado sus mayores ganancias territoriales desde finales de 2022. Las autoridades ucranianas han dicho en los últimos días que la situación en la región se ha estabilizado gracias al despliegue urgente de unidades ucranianas que han logrado frenar el avance ruso. El Ejército ucraniano ha advertido que Rusia podría abrir otro frente más al norte de Járkov, hacia la ciudad de Sumy. Los funcionarios han dicho que Rusia está concentrando fuerzas en la frontera y llevando a cabo incursiones de sabotaje y reconocimiento en la zona. El general Kyrylo Budanov, jefe de inteligencia militar de Ucrania, dijo al New York Times la semana pasada que esperaba que las fuerzas rusas hicieran un fuerte avance en dirección a Sumy después de la culminación de su ofensiva en la región de Járkov. Por ahora, las tropas rusas parecen decididas a capturar Vovchansk. Han estado bombardeando la ciudad durante días con potentes armas guiadas conocidas como bombas planeadoras que pueden llevar cientos de kilogramos de explosivos al impacto, dijeron funcionarios ucranianos. Después de llegar a las afueras de la ciudad en los primeros días de su ofensiva hace 10 días, las fuerzas rusas se adentraron lentamente en ella, participando en combates callejeros. Oleh Syniehubov, jefe de la administración militar regional de Járkov, dijo el lunes que la línea del frente en Vovchansk ahora corre a lo largo del río Vovcha, que separa la parte norte de la ciudad del resto. “Nuestros soldados están tratando de recuperar casa por casa, calle por calle”, dijo. Las fuerzas rusas también han realizado ataques en puentes a lo largo de un río que corre más al sur, en lo que parece ser un intento de interrumpir las líneas logísticas de Ucrania en la zona. “Vovchansk es el mayor asentamiento inmediatamente en la frontera que proporcionaría a las fuerzas rusas una base de operaciones cerca del retaguardia rusa para preparar y lanzar la segunda fase de la operación ofensiva rusa”, dijo el Instituto para el Estudio de la Guerra, un grupo de expertos con sede en Washington, durante el fin de semana. Las autoridades ucranianas han estado luchando por evacuar bajo fuego a los residentes de la ciudad. “La situación en Ucrania ha vuelto a deteriorarse drásticamente con los masivos ataques aéreos rusos en la infraestructura civil y la brutal ofensiva rusa en el área de Járkov”, dijo la ministra de Relaciones Exteriores de Alemania, Annalena Baerbock, el martes durante una visita a Kyiv.
