La UE mantiene la prohibición de pesca en España para proteger a los delfines en época de apareamiento: 300 barcos se verán afectados.

La Unión Europea ha ordenado una prohibición de pesca de un mes a lo largo de la costa norte de España y el Golfo de Vizcaya para proteger a las poblaciones locales de delfines durante su crucial temporada de reproducción.

Votó a favor de mantener la prohibición en una votación parlamentaria decisiva después de que 511 eurodiputados dieran luz verde a la paralización de casi 300 embarcaciones de pesca entre el 22 de enero y el 20 de febrero de 2025.

Respaldada por Bélgica, España, Francia y Portugal, la medida forma parte de una estrategia más amplia para reducir el daño a delfines y otros pequeños cetáceos.

La medida drástica llega después de años de preocupación por las capturas accidentales de delfines en redes de pesca, con científicos señalando el período como particularmente de alto riesgo para los mamíferos marinos.

La Bahía de Vizcaya. Por Iago Casabiell González, CC BY-SA 4.0

Los barcos de pesca de más de ocho metros de longitud estarán completamente prohibidos de operar y obligados a permanecer en el puerto mientras los delfines llevan a cabo sus rituales de reproducción.

Pero no se trata solo de mantener los barcos en puerto.

Las nuevas regulaciones también incluyen dispositivos de disuasión acústica, programas de monitoreo durante todo el año e incluso cámaras a bordo para garantizar el cumplimiento.

La Comisión Europea está tomando medidas después de los encallamientos recurrentes de delfines en la región en años anteriores.

A principios de este año, las autoridades francesas implementaron restricciones similares, y ahora España está siguiendo su ejemplo.

Para las comunidades pesqueras locales, será un mes difícil. Los barcos que suelen pescar merluza, rape y otras especies se verán obligados a tomar un descanso.

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Pero los conservacionistas argumentan que es un pequeño precio a pagar por proteger a estas cruciales poblaciones marinas.

La Comisión planea monitorear de cerca la efectividad de estas medidas a lo largo de 2025, dejando la puerta abierta para regulaciones potencialmente aún más estrictas si las poblaciones de delfines continúan estando en riesgo.