La Policía Local de Torrevieja continúa apretando su control sobre los patinetes eléctricos, iniciado a principios de septiembre, al comienzo del año escolar, hacia las empresas que los ofrecen para alquilar, pero no se aseguran de que estén estacionados correctamente.
En algunas ocasiones en las últimas semanas, los vehículos de recuperación municipales han retirado hasta 30 unidades de una vez. Los encuentran dispersos en muchas partes del centro de la ciudad, donde regularmente se les ve obstaculizando el movimiento de los peatones, abandonados en aceras y frente a rampas de acceso.
La retirada de estos patinetes propiedad de empresas de alquiler ha llevado regularmente a la policía a retirarlos cuando están agrupados en terrenos públicos sin la licencia obligatoria para estar allí. Se encuentran junto a islas de contenedores de basura, aceras o áreas reservadas para estacionamiento de automóviles, en una tendencia que comenzó después de la pandemia y que alcanzó proporciones epidémicas durante el verano pasado.
Inicialmente, las empresas que deseen recuperar sus patinetes deben pagar una multa por cada uno de ellos, pero incluso con este disuasivo, el dinero que pueden ganar les permite a las empresas seguir operando de manera irregular.
Es un negocio lucrativo, especialmente en verano, en un municipio con una periferia en gran parte urbanizada, que aún tiene muchas deficiencias en su sistema de transporte público y sin suficiente oferta de taxis. Con los operadores bastante contentos de optar por el pago de sanciones, es probable que estos mismos problemas que se repiten en muchos municipios locales estén con nosotros durante algún tiempo.