Desde que José Ignacio Munilla fue trasladado de su cargo como Obispo de San Sebastián, después de diez años de controversia, a la Diócesis de Orihuela-Alicante, sus declaraciones han causado una gran preocupación e inquietud entre muchos sectores de la sociedad oriolana.
Sus comentarios han incluido retórica abiertamente antifeminista y oposición a los derechos LGTB, destacándose su reciente defensa de las llamadas “terapias de conversión” como particularmente alarmante.
Estas prácticas han sido condenadas inequívocamente por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Asociación Española de Psicología (AEP).
Además, estas terapias están explícitamente prohibidas y sancionadas por la Ley 4/2023 de 28 de febrero, que garantiza la igualdad real y efectiva para las personas transgénero y asegura los derechos LGTB. La promoción o normalización de tales prácticas, como lo hace el Obispo Munilla, se considera una grave infracción según esta ley.
Leticia Pertegal, portavoz de Cambiemos Orihuela, criticó enérgicamente las acciones del obispo, afirmando: “Es inaceptable que el Obispo de Orihuela estigmatice y persiga a la comunidad LGTBI, especialmente al defender las terapias de conversión, que constituyen una clara forma de tortura. El Ayuntamiento, como protector de los derechos y la dignidad de todos los ciudadanos, debe tomar posición y condenar públicamente las declaraciones del Obispo Munilla por violar los derechos humanos”.
Juan López, concejal del grupo municipal Socialista, añadió: “La comunidad LGTBIQ+ está harta de los continuos ataques del obispo desde su llegada a Orihuela. La impunidad con la que promueve un acto criminal, porque recordemos, las terapias de conversión son ilegales, demuestra hasta qué punto las ideologías de extrema derecha han infiltrado nuestras instituciones. Exigimos que el Ayuntamiento, como mínimo, rechace públicamente estas declaraciones. La gente de Orihuela merece el apoyo institucional de nuestro gobierno local frente a este ataque directo a nuestros derechos”.
De manera similar, Mar Ezcurra, concejal de Ciudadanos, insistió en que “el Ayuntamiento debe rechazar firmemente y de manera inequívoca las declaraciones del obispo que respaldan las terapias de conversión. Estas prácticas han sido condenadas por la OMS y son punibles por ley, ya que violan los derechos de las personas LGTBI. Por eso presentamos esta moción, para asegurar que el gobierno municipal tome una postura clara contra tales declaraciones”.
Ante estas preocupaciones, los partidos de la oposición han presentado una moción proponiendo las siguientes resoluciones:
Un rechazo firme e inequívoco de las declaraciones del Obispo José Ignacio Munilla, que socavan los derechos y la dignidad de las mujeres y la comunidad LGTB, así como cualquier forma de intolerancia y discriminación basada en el género, la orientación sexual o la identidad de género.
Un llamamiento al Obispo José Ignacio Munilla para que se retracte públicamente de sus declaraciones y se desvincule de cualquier apoyo a las “terapias de conversión”, promoviendo en su lugar un mensaje de respeto, inclusión y atención integral para todas las personas, independientemente de su orientación sexual o identidad de género.
La presentación de esta moción a la Diócesis de Orihuela-Alicante, la Delegación del Gobierno en la Comunidad Valenciana, la Generalitat Valenciana y la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) para garantizar que se tomen medidas apropiadas para prevenir la promoción de discursos de odio y la discriminación en cualquier institución pública o religiosa.
Un compromiso del Ayuntamiento de Orihuela a abstenerse de participar o proporcionar apoyo financiero directo o indirecto para cualquier actividad que viole el Artículo 82 de la Ley 4/2023.