El Secretario General de las Naciones Unidas, António Guterres, pidió el viernes un alto el fuego de una semana en Gaza para permitir vacunaciones y prevenir un brote de polio, diciendo que muchos niños estaban en riesgo. Habló justo unas horas antes de que se confirmara el primer caso de polio en la franja en muchos años en un comunicado del ministerio de salud de Gaza. La polio es una enfermedad altamente infecciosa que afecta principalmente a niños pequeños, atacando el sistema nervioso y pudiendo llevar a parálisis espinal y respiratoria, y en algunos casos, la muerte. El virus que la causa se encontró circulando en las aguas residuales de Gaza en julio. Los niños representan aproximadamente la mitad de la población de Gaza, y la Iniciativa Mundial para la Erradicación de la Polio dijo que las tasas de vacunación eran altas hasta que comenzó la guerra hace más de 10 meses. La OMS y UNICEF también han pedido una pausa en la guerra para llevar a cabo vacunaciones en Gaza. El virus de la polio ha sido detectado en muestras de aguas residuales en Khan Younis, en el sur de Gaza, y Deir al Balah, en la parte central de la franja, ambas con grandes poblaciones de palestinos desplazados huyendo de los ataques israelíes. La guerra ha llevado a una disminución en la cobertura de inmunización rutinaria para la segunda dosis de la vacuna inactivada contra la polio, pasando del 99 por ciento en 2022 a menos del 90 por ciento en el primer trimestre de 2024. El riesgo de que la polio se propague en Gaza, y a nivel internacional, es alto debido a las brechas en la inmunidad de los niños debido a interrupciones en la vacunación rutinaria, la destrucción del sistema de salud, el desplazamiento constante de la población, la desnutrición y los sistemas de agua y saneamiento gravemente dañados. Los funcionarios de salud de Gaza dijeron el viernes que “varios niños” habían presentado síntomas consistentes con la polio y que las pruebas de laboratorio habían revelado que uno de ellos estaba infectado con el virus de la polio. Guterres dijo que las Naciones Unidas estaban listas para comenzar un amplio esfuerzo de vacunación que se centraría en más de 640,000 niños menores de 10 años en Gaza. El esfuerzo incluiría dos rondas de inyecciones para los receptores. Llevar a cabo una operación a gran escala requeriría una serie de arreglos complicados: seguridad y acceso tanto para los trabajadores médicos como para los receptores de la vacuna; la disponibilidad de equipos para la refrigeración de las vacunas; combustible; efectivo; y servicios de internet y móviles. En una declaración el viernes, Hamas dijo que apoyaba la solicitud de las Naciones Unidas de un alto el fuego de siete días para las vacunaciones y también exigía “la entrega de medicamentos y alimentos a más de dos millones de palestinos atrapados en la Franja de Gaza.” Entre las otras enfermedades que se propagan en la franja se encuentra la hepatitis A. Más de 100,000 personas en Gaza han contraído el síndrome de ictericia aguda, o se sospecha de hepatitis A, desde que comenzó la guerra entre Hamas e Israel, dijo la OMS en julio. Desde que comenzó la guerra, los trabajadores de ayuda también han advertido sobre la posibilidad de una epidemia de cólera, que podría llevar rápidamente a una mortalidad masiva, pero hasta ahora no se ha materializado.
