PEKÍN (Reuters) – La inflación al consumidor de China se mantuvo estable en mayo, mientras que las caídas de los precios de los productores disminuyeron, pero la tendencia subyacente sugiere que Pekín tendría que hacer más para sostener la débil demanda interna y una recuperación económica desigual.
El índice de precios al consumidor (IPC) subió un 0,3% en mayo respecto al año anterior, igualando el aumento de abril, según datos de la Oficina Nacional de Estadísticas (NBS) mostrados el miércoles, por debajo de un aumento del 0,4% pronosticado en una encuesta de Reuters.
El IPC bajó un 0,1% respecto al mes anterior, frente a un aumento del 0,1% en abril y en comparación con las previsiones de los economistas de un crecimiento nulo.
La caída del índice de precios al productor (IPP) se moderó al 1,4% en mayo desde el 2,5% en abril, en comparación con una previsión de un descenso del 1,5%.
“Creo que la presión deflacionaria aún no ha desaparecido”, dijo Zhiwei Zhang, economista jefe de Pinpoint Asset Management.
“La inflación del IPC es ligeramente negativa en términos mensuales. La mejora en el IPP se debe en gran medida a los precios de los productos básicos como el cobre y el oro, lo que no refleja la demanda interna de China”, dijo.
La economía de China ha tenido dificultades para avanzar a pesar del fin de las restricciones rigurosas por COVID a finales de 2022, principalmente debido a los efectos secundarios de una prolongada crisis en el sector inmobiliario en la confianza de inversores, empresas y consumidores.
Pekín ha implementado varias medidas para impulsar la demanda en el sector de la vivienda y ha lanzado otros programas para estimular el sentimiento del consumidor, incluyendo incentivos subvencionados por el gobierno para impulsar los intercambios de automóviles y otros bienes de consumo.
También se ha comprometido a crear más empleos vinculados a proyectos importantes, implementar medidas para promover la demanda interna dirigidas a los jóvenes y ha prometido un mayor estímulo fiscal para respaldar el crecimiento.
Los datos del miércoles sobre la medida de inflación básica, que excluye los precios volátiles de alimentos y energía, destacaron la fragilidad de la demanda interna. Se situó en un 0,6% en mayo interanual, desacelerándose desde el 0,7% en abril.
Muchos economistas esperan que Pekín anuncie más medidas de apoyo en los próximos meses para mantener la economía en camino de alcanzar su objetivo de crecimiento del PIB de “alrededor” del 5% para este año, y fomentar una recuperación sostenible.
“Podría ser necesario un enfoque más completo y proactivo que abarque lo fiscal, monetario y el sector inmobiliario para impulsar la demanda interna de manera más efectiva”, dijo Zhang de Pinpoint.
(Reporte de Qiaoyi Li, Liangping Gao y Ryan Woo; Edición de Shri Navaratnam)