La Guardia Civil aconseja a los padres que vigilen a sus hijos.

En España, la Guardia Civil ha emitido una alerta en sus redes sociales sobre un peligro para las mascotas, especialmente los perros, durante los paseos en parques y bosques. Se trata de las orugas procesionarias, un insecto que, a pesar de su apariencia inofensiva, representa un riesgo significativo para la salud de los animales y los niños.

La Guardia Civil ha advertido que estas orugas tienen pelos urticantes que pueden causar reacciones muy graves en los animales al entrar en contacto con la piel o las membranas mucosas, liberando una toxina que provoca irritación, inflamación y, en casos graves, necrosis.

La Guardia Civil recomienda tomar precauciones extremas al pasear a tu perro y evitar las zonas donde se haya detectado la presencia de orugas. Si sospechas que tu mascota ha entrado en contacto con ellas, es crucial actuar rápidamente para evitar que el animal se lama la zona afectada, lo que podría agravar la reacción.

La oruga procesionaria del pino se refugia en bolsas de seda en los pinos durante el invierno. A medida que las larvas maduran, descienden de los árboles en la característica ‘procesión’ de la que toman su nombre, buscando un lugar donde enterrarse y convertirse en mariposa. Es en este momento cuando liberan sus pelos urticantes como mecanismo de defensa, representando un riesgo para la salud de personas y animales.

Según los expertos en salud animal, los síntomas más comunes del contacto con los pelos urticantes de la oruga procesionaria en perros incluyen lesiones en la lengua, babeo excesivo, hinchazón de la boca y la garganta, y dificultad para respirar. En casos graves, puede causar shock anafiláctico y requerir atención veterinaria urgente.

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Además de los perros, los niños también son particularmente vulnerables a los efectos de la oruga procesionaria. El contacto con sus pelos puede causar erupciones cutáneas, picazón intensa, inflamación y, a veces, reacciones alérgicas graves. Por lo tanto, es esencial que los padres estén vigilantes y eviten que los niños se acerquen o toquen estas orugas.