Un informe encargado por la FIFA ha concluido que el organismo rector del fútbol “tiene la responsabilidad” de compensar a los trabajadores que sufrieron durante la celebración de la Copa del Mundo de Qatar 2022.
El esperado informe del subcomité de derechos humanos y responsabilidad social de la FIFA, finalmente publicado el viernes a medianoche hora de Europa Central, señala que el organismo rector “tomó una serie de medidas para cumplir con su responsabilidad de respetar los derechos humanos” como parte de la entrega del torneo hace dos años.
Sin embargo, la FIFA no cumplió con una de las recomendaciones principales del informe de utilizar el Fondo de Legado de Qatar para remediar a los trabajadores afectados por abusos de derechos humanos, en su lugar anunciando que donarían el dinero a varios otros programas que no compensarán directamente a los trabajadores en Qatar.
La FIFA insistió en que el estudio no era “una evaluación legal de la obligación de remediar”.
El estudio independiente, encargado por el subcomité y desarrollado por la firma de asesoría en derechos humanos y comercio ‘Human Level’, señala que “se produjeron una serie de impactos graves en los derechos humanos en Qatar desde 2010 hasta 2022” para varios trabajadores relacionados con el torneo.
Esto incluyó “muertes, lesiones y enfermedades; salarios que no se pagaban durante meses; y deudas significativas enfrentadas por los trabajadores y sus familias al reembolsar las tarifas que pagaron para obtener empleo en Qatar”.
Si bien reconociendo que “la principal responsabilidad de rectificar tales deficiencias recae en los empleadores directos de estos trabajadores, así como en el gobierno catarí”, el subcomité “respalda la opinión expresada en el Estudio de Nivel Humano de que la FIFA también tiene la responsabilidad de tomar medidas adicionales para contribuir a la provisión de remedios a estos trabajadores”.
Los organizadores de la Copa del Mundo han cifrado el número de muertes directamente relacionadas con la entrega del torneo en 40. Los grupos de derechos humanos han estimado desde hace tiempo que miles de trabajadores murieron.