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El Ministerio de Transportes de España afirma que la deuda adeudada a las aerolíneas en relación con el descuento para residentes es un problema administrativo específico que no afectará el servicio. Los pagos se realizarán “una vez que se completen todos los procedimientos administrativos”, y el descuento del 75% “sin duda no se modificará”.
La Asociación de Aerolíneas de España (ALA) está preocupada de que las facturas impagas puedan subir de un total actual de 810 millones de euros a 1.5 mil millones porque el gobierno no ha podido establecer un presupuesto para 2025. Para evitar esto, las aerolíneas instan al gobierno a tratar a las aerolíneas como meros intermediarios. De lo contrario, las aerolíneas que operan rutas hacia y desde la península y entre las islas podrían verse obligadas a cesar la operación de algunas rutas o a reducir las frecuencias debido a la “situación insostenible y financieramente paralizante generada por los impagos del gobierno”.
El presidente de la ALA, Javier Gándara, argumenta que si la situación continúa, las rutas podrían volverse inviables y, por lo tanto, afectar el empleo y el desarrollo económico. “El transporte aéreo es el facilitador de la actividad turística en las Islas Baleares, que es el principal motor del crecimiento económico y generador de empleo, representando el 45% del PIB y el 32% del empleo”.
La asociación contrasta la falta de compromiso presupuestario del gobierno con los esfuerzos de las aerolíneas para aumentar la conectividad aérea, “que es esencial para la cohesión territorial, el comercio y el desarrollo económico y social”.
Por su parte, el gobierno regional exige que el Gobierno Español resuelva de inmediato el problema del descuento para residentes, afirmando que es inaceptable que los ciudadanos de las Islas Baleares puedan verse afectados. La consejería balear de movilidad deja claro que esto es “100% responsabilidad del gobierno central”.
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