Si bien no hay duda de que en el mundo de hoy es importante tener fácil acceso al transporte aéreo internacional, también es necesario respetar a aquellos que viven cerca de los aeropuertos.
Algunos argumentarían que si eliges vivir en una propiedad cerca de cualquier aeropuerto, debes esperar que haya un fuerte elemento de ruido y contaminación del aire, pero en Portugal, por ejemplo, se construirá un nuevo aeropuerto que servirá a Lisboa en una zona completamente nueva, con los residentes locales teniendo que decidir si quedarse o irse.
Actualmente existen restricciones en los vuelos desde el aeropuerto actual de Lisboa, con solo unos pocos vuelos permitidos entre la medianoche y las 6 de la mañana, pero por alguna razón, las aerolíneas o la administración del aeropuerto parecen haber ignorado la regla durante 2024.
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La contaminación acústica en el aeropuerto de Lisboa se dispara en 2024 con 40 veces más multas impuestas que en 2023
En 2023, se impusieron multas de solo €266,200 a las aerolíneas por violar las reglas, incluidos los viajes nocturnos y la falta de franjas horarias, pero en 2024, esto se ha disparado a €8,721,600 según la Autoridad Nacional de Aviación Civil (ANAC), lo cual es una noticia impactante.
Para que una aeronave despegue o aterrice, debe ser guiada por el control de tráfico aéreo y tener acceso a la pista y al aeropuerto por parte de quienes gestionan las instalaciones de Lisboa, por lo que parece que ha habido un colapso masivo en los procedimientos que actualmente no tiene explicación.
Ampliando los detalles de las transgresiones, la ANAC observó que 82 compañías habían recibido advertencias por 246 infracciones, aunque esto podría disminuir a medida que se escuchen apelaciones contra las multas y se revisen algunos cargos.
Se necesita tomar medidas para abordar la contaminación acústica en el aeropuerto de Lisboa
Si esto es una verdadera causa de contaminación acústica, entonces se deben tomar medidas para que las aerolíneas y el aeropuerto vuelvan a cumplir con el bienestar de quienes viven cerca o bajo los patrones de vuelo.
El Gobierno portugués ha indicado que intervendrá para revisar la situación y endurecerá las reglas en Lisboa y otros aeropuertos si se considera necesario.
Esto también debería ser un indicador de las reglas que deberían entrar en vigencia cuando el nuevo aeropuerto de Lisboa esté listo para abrir, como se espera para 2034.