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Las estadísticas turísticas de julio, publicadas el lunes, mostraron una caída del diez por ciento interanual en el turismo británico en las Islas Baleares. Si esta disminución puede atribuirse en su totalidad, en parte o en absoluto a las protestas – y a la cobertura de estas protestas – es motivo de debate. Pero antes de que se publicaran las cifras, la agencia de estrategia turística AETIB del gobierno balear estaba en contacto con su agencia de comunicaciones de marketing en el Reino Unido, Lotus, respecto a una campaña mediática diseñada para mitigar posibles efectos negativos de las protestas.
Por lo tanto, se han enviado comunicaciones a los medios de comunicación así como a operadores turísticos y agencias de viajes. Estas están destinadas a transmitir mensajes de tranquilidad de que los turistas son más que bienvenidos en las islas y no deberían temer una recepción hostil o muestras de ‘turismofobia’.
AETIB da un ejemplo de cómo los medios extranjeros pueden tener una impresión distorsionada de la situación. Un periodista del Sunday Times recientemente se reunió con el ministro de turismo Jaume Bauzá, habiendo llegado a Mallorca anticipando hostilidad. Aunque se encontró con una conciencia general de la necesidad de abordar los problemas causados por la masificación turística, el periodista descubrió que una imagen anti-turismo era completamente errónea. Esto fue hablando con personas en las calles, taxistas y otros.
Mientras que la industria turística en las Islas Baleares ha recibido con agrado la campaña mediática, una fuente del sector de alquileres vacacionales expresa dudas sobre su efectividad: “No importa cuánto les digan que todo está bien, si los posibles visitantes ven una imagen en la televisión con un lema que dice matar a un turista, lo pensarán dos veces”.
AETIB también ha estado en contacto con su agencia de relaciones públicas en Alemania, GCE. Se han enviado comunicaciones con los mismos mensajes a los medios alemanes y a los operadores turísticos. Pero Alemania, en lo que respecta a las cifras turísticas de julio, mostró una imagen diferente a la del Reino Unido – el número de turistas aumentó un 12%. De mercados más pequeños que el Reino Unido y Alemania, Francia aumentó un 22% e Italia disminuyó un 11%. El mercado español bajó un 13%, pero el turismo extranjero en general aumentó un 4.3%.
En el mercado británico, desde abril las cifras mensuales indican un aumento del 0.3% (en abril), una caída del 5.9% en mayo y un aumento del 2.4% en junio antes de la caída del 10% en julio.
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